Leonor es la gran esperanza blanca de los Borbones para mantener la monarquía como negocio familiar. Algunos expertos cronistas reales, como el más sabio Jaime Peñafiel, ponen en duda que Leonor llegue a ser reina. Los escándalos han sido tan descomunales que uno nuevo sería el final de Felipe. Algunos creen que habría todavía una última bala: la buena prensa de Leonor. La chica será adulta pasado el verano y Felipe en Catalunya ya se esconde tras las faldas de su hija: "Leonor, sal tú". La princesa y su hermana Sofía únicas protagonistas del primero y el segundo acto oficial de la Familia Real en Catalunya por los Premios Princesa de Girona. Empujar a Leonor a ser el centro de atención está bien siempre y cuando no lo envíen a la guerra con una escopeta de perdigones: Zarzuela y Letizia escogieron y dieron el visto bueno a un vestido naranja horroroso, que le quedaba fatal, que era inadecuado y que jugaba con el rojo de la infanta Sofía a hacer los colores de la rojigualda. Leonor se lo miraba y ponía cara de asco. Iba hecha un cromo:
El efecto óptico de ver a Leonor y Sofía dibujando los colores de la bandera de España en Catalunya fue percibido por los tuiteros. La sabiduría popular dictó sentencia: estas niñas van vestidas por su peor enemigo. Solo fue necesario que la experta y catalana Pilar Eyre hiciera un tuit que ni citaba la ropa de las chicas para que los tuiteros se lanzaran a cotillear: Leonor y Sofía van horripilantes, de señoras del Opus, antiguas, chonis y fatal:
El último tuit que se apunta a una opinión generalizada, Letizia es responsable del mal look de la hija por pura envidia, ha venido a robarrle el sitio. Parece que vistiéndola de muñeca de los años 40 está diciéndole quieta aquí que hoy salgo yo con un traje para caer de culo a mis 50 años. De momento Leonor y Sofía se han plantado para el segundo día en Catalunya, acto de la mañana, y han escogido un look mucho más normal de chicas de su edad. Siguen con las alpargatas pero con dos vestidos azules veraniegos, adecuados y discretos:
El miércoles también era el día para hacer salir a Letizia del escondrijo gerundense, en Caldes de Malavella. Felipe sonreía aliviado porque la cosa no va con él y Letizia aparecía especialmente guapa, con vestido como es debido y no con trapos de cocina y cortinas de ducha. Letizia es la mano negra tras los looks de niña opusina de Leonor.