La Corona española ha traicionado el espíritu de la democracia. Cuando se decidió incorporar la monarquía a la Constitución se confió no en una persona, Juan Carlos, sino en una familia entera: los Borbones. No solo se escogía un jefe de Estado sino que se decidió que los sucesivos jefes de Estado serían sus parientes: el hijo pequeño, la nieta o a quien corresponda en el orden sucesorio. Entonces no se sabía lo que ha acabado pasando: que la familia Borbón, los descendentes de Juan Carlos, se han creído tan intocables que se han comportado como nuevos ricos, pijos, perezosos, soberbios y poco preparados no ya para reinar sino para educar a sus hijos adolescentes. De los ocho nietos del emérito, seis ya están en edad universitaria o adulta y ni uno solo ha estudiado una carrera mínimamente normal: Derecho, Medicina, Ingeniería, Economía... Nada. El gran fracaso de Felipe es que la Corona está en manos de una generación de indolentes.
Los dos primeros nietos del rey emérito, los Marichalar, no entraron en ninguna universidad pública. No tenían bastante nota y Juan Carlos pagaba la matrícula privada de 20 mil euros el año cada uno que cursaron en el CIS University. Una Universidad norteamericana, de élite y pijos madrileños en el barrio de Salamanca. Allí no guardan buen recuerdo de los primos mayores de Leonor: "Froilán y Victoria Federica no llegaron a terminar su titulación. Eran muy simpáticos, pero no buenos estudiantes. Él más centrado en la fiesta y ella en su carrera de influencer, ninguno cumplió con las exigencias de esta facultad". Froilán quiso hacer la rama Negocios. Son 4 años de carrera. Duró dos. La hermana también dejó colgados los estudios de Marketing y Comunicación. Los cuatro Urdangarin han hecho lo mismo pero a escondidas, estudiando en el Reino Unido para que cueste más encontrar testigos. Ninguna carrera con cara y ojos, ninguno ha encontrado trabajo por si, excepto Pablo que es deportista. Quedan las dos esperanzas blancas: Leonor y Sofía.
Leonor acaba de ser señalada por una compañera de estudios muy especial, la princesa Alexia de Holanda que cursó el Bachillerato en Gales con Leonor. Pero mientras la hija de Letizia hace dos años que viste el uniforme militar, Alexia ya ha ingresado en la Universidad de Londres y para estudiar no cualquier minucia, como Irene Urdangarin que cursa "Organización de Eventos". Según se acaba de saber, Alexia es muy ambiciosa y en Londres hará una complicada Ingeniería Civil, es decir que estudiará diseño y construcción de infraestructuras, puentes, túneles, diques... Muy adecuado tratándose de un país, Holanda, que vive bajo la amenaza de que el cambio climático hunda su costa en el océano Atlántico. Un gesto de inteligencia y entender que en una princesa, la imagen y el ejemplo son lo más importante.
Leonor está decidida a poner punto final en la imagen humillante de sus seis primos llamados a sucederla, todos colgando los estudios o estudiando banalidades. La princesa ha informado a Felipe de que no piensa estudiar Derecho como él sino como Alexia, una Ingeniería. Una decisión en firme que solo tiene un problema, empezará tarde, el otoño de 2026. Ingresará en la Universidad cuando muchos la han acabado, con 21 años. Es el peaje que Felipe obligó a pagar a su hija: que pasara 3 años enteros en el Ejército. Leonor tiene ganas de coger los libros y colgar las armas. Quiere ser Alexia y no Froilán.