Tras dos años muy duros en el UWC Atlantic College en Gales y celebrar su gran gala de graduación, la princesa Leonor se encuentra lista para el siguiente capítulo de su vida. Pero antes de sumergirse en sus compromisos oficiales, quiere darse un respiro personal. Después de un año lleno de desafíos, quién puede culparla. Su idea es disfrutar de un viaje con sus amigos del internado en Gales como parte de su viaje de fin de curso. Sobre todo antes de enfrentarse a su nueva etapa en la Academia Militar, donde pasará tres años recibiendo formación en los ejércitos de tierra, mar y aire.
Entre los posibles destinos que se barajan, suena con fuerza la opción de ir a la vibrante ciudad de Nueva York. Y aquí viene lo interesante: casualmente, ese es el hogar de su ‘noviete’, tal y como lo bautizó Pilar Eyre en una intervención en el programa 'Espejo Público'. Un chico de origen brasileño con el que ha compartido los últimos dos años en el internado de Gales y con el que se le han visto detalles que confirmarían la relación. Abrazos, carantoñas y muy poca distancia en todas las fotos.
Letizia no ve con buenos ojos que Leonor se vaya de viaje de fin de curso a Nueva York
Pero hay alguien a quien este viaje no le hace demasiada gracia: Letizia. Resulta que la reina no está muy convencida de enviar a su hija a 5.764 kilómetros de Madrid en compañía de su novio. Ni pizca de gracia. Aunque vayan varios compañeros del internado, Letizia no termina de estar segura de esta "excursión" romántica.
Ante este panorama, Letizia no descartaría montarse un viaje a Estados Unidos durante las mismas fechas. Una ciudad que le encanta y que ya visitó hace un tiempo junto a sus hijas, Leonor y Sofía, en un viaje de chicas al margen de Felipe. Repetir un viaje como aquel no dejaría tan en evidencia a Leonor. Menos aun si también se apunta la hija pequeña como regalo por haber completado la ESO.