El 11 de enero, la princesa Leonor comenzó una de las experiencias más desafiantes de su formación como futura Jefa de los Ejércitos, embarcándose en el legendario Juan Sebastián Elcano, el buque escuela de la Armada Española, siguiendo los pasos de su padre, el rey Felipe VI, y su abuelo, el rey Juan Carlos I. Durante seis meses, Leonor recorrerá 17.000 millas náuticas, deteniéndose en diversas naciones de América Latina. Sin embargo, esta etapa está resultando ser más compleja de lo que muchos esperaban.
El viaje de Leonor no ha estado exento de dificultades. Una de las principales dificultades que ha tenido que enfrentar ha sido el mareo constante debido a la cinetosis, que ha puesto a prueba su resistencia. La princesa ha sufrido varios episodios de náuseas y vómitos durante las primeras semanas, que requirieron medicación regular para aliviar su malestar. Además, esta situación ha provocado que Leonor haya perdido peso y haya sufrido varias caídas mientras realizaba sus tareas diarias, lo que le ha dejado hematomas visibles en su cuerpo.
Arrestos y amonestaciones a algunos de los guardamarinas en el Juan Sebastián Elcano
Sin embargo, uno de los incidentes que ha llamado la atención no está relacionado con su salud física, sino con un comportamiento inapropiado a bordo del barco. En uno de los puertos de Brasil, según recoge el portal Don Balón, algunos jóvenes marineros a bordo decidieron llevar botellas de alcohol de manera ilegal, con la intención de organizar reuniones secretas para beber y socializar, algo totalmente prohibido por las estrictas normas del buque.
Aunque Leonor no fue quien introdujo el alcohol ni organizó el evento, se encontró presente en uno de los encuentros. Por lo tanto, habría participado en el consumo de bebida alcohólica.
Leonor, amonestada por un comportamiento inapropiado
Este incidente no pasó desapercibido y, como resultado, la princesa fue amonestada oficialmente. Los oficiales del barco son conscientes de los comportamientos habituales de algunos jóvenes a bordo. No es nada nuevo, ha pasado siempre en anteriores travesías. En estos casos, se llevan a cabo inspecciones de los camarotes para asegurar que no se repitan situaciones similares. Las botellas de alcohol fueron confiscadas inmediatamente y los responsables fueron sancionados.
Como decíamos, este tipo de situaciones no son algo nuevo en las travesías del Elcano, pero el hecho de que la princesa Leonor esté involucrada en un episodio de este tipo ha generado cierto revuelo. La diferencia radica en el estatus de la princesa, lo que hace que el incidente sea más mediático.