Hasta el próximo 14 de febrero no volveremos a tener ninguna noticia de Leonor. Los medios de comunicación la esperan en Brasil, prácticamente tres semanas tardará en llegar el buque escuela Juan Sebastián Elcano de Canarias a São Paulo. 21 días donde los guardiamarinas estarán encerrados en pocos metros cuadrados. Conviven juntos en literas en pequeños compartimentos de cuatro personas, con un baño para los cuatro. Son un total de 75 jóvenes.
La princesa estaba preparada para esta nueva aventura, una de las mayores experiencias de su corta edad. Aunque no estaba en la mejor forma física para afrontar este reto y está teniendo sus primeras consecuencias. Aunque parezca lo contrario, Leonor ha ido pocas veces en barco, y menos en uno de estas características. Siempre en un lujoso yate con todas las comodidades. Letizia no era muy fanática de la alta mar. La reina Sofía pagaba a todos sus nietos cuando eran pequeños un curso de vela para que se iniciasen en el deporte más Borbón de todos, pero en el caso de Leonor y Sofía, la actual reina se lo prohibió porque quería alejarlas completamente de los Borbón. Así que no aprendieron desde bien pequeñas a montar en un velero.
El buque escuela partió desde Cádiz, donde Leonor se despidió de Letizia y Felipe VI. No volverán a ver a su hija hasta dentro de seis meses, cuando acabará esta aventura en Galicia, aunque ella podría finalizarla antes y después ser trasladada con sus compañeros. Visitarán un total de ocho países y todas las veces que la princesa ponga un pie en tierra será considerado una visita oficial.
Leonor atendida por el médico de urgencias
Leonor siente claustrofobia dentro del barco, es demasiado tiempo encerrada en tan pocos metros cuadrados sin salir para nada, solo a la cubierta, y prácticamente no puede por la mala mar y el frío. No se hace a esta nueva vida, pero está poniendo todos sus esfuerzos. Los primeros días han sido los más difíciles de todos. La hermana de Sofía sufrió mareos y vómitos y tuvo que ausentarse de las clases, se confinó en su camarote. Visitó al médico varias veces en la última semana y finalmente tuvo que medicarse para soportar el trayecto.
La princesa sufre cinetosis, el mareo por movimientos que es muy habitual en barcos o coches. Sucede cuando no se presta atención al entorno y el cuerpo percibe movimiento, pero los ojos y los oídos no.
El médico del barco le ha recetado lo común en estos casos, el medicamento más eficaz, la biodramina. Tarda unos 15 a 30 minutos en hacer efecto y se suele tomar una vez cada ocho horas mientras persistan los mareos.
