Leonor será la futura reina de España y como tal debe realizar la formación militar obligatoria para cualquier Jefe de Estado. Ya lo hicieron Juan Carlos I y Felipe VI, y ahora es su turno. Son tres años en los que debe conseguir la máxima condecoración de los tres ejércitos, tierra, mar y aire. Sus resultados académicos no interfieren en los de sus compañeros, ella siempre recibirá la máxima puntuación aunque no llegue al nivel. En más de una ocasión se le ha dicho que estaba en baja forma y ha tenido que recibir entrenamientos privados para mejorar y poder llevar el ritmo. Ha pasado por el ejército de tierra y ahora está terminando su formación con la Armada.

La hermana de Sofía navega ahora mismo por las aguas del pacífico a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano. Lleva tres meses de travesía y ha visitado tres países de los ocho del programa. Brasil, Uruguay y Chile. Pero ha sido una aventura más larga y dura de lo que esperaba. La hija de Letizia ha sentido la persecución mediática. Hay mucha expectación y están preparados con las cámaras ante cualquier movimiento.
Fotografiaron a Leonor en compañía de un joven guardiamarina que está realizando esta travesía con ella. Entre ellos hay una gran complicidad y el paparazzi que les fotografió aseguró que eran pareja, él vio como se besaron pero no hay una imagen de ese famoso beso. Lo que finalmente se publicó fueron las fotografías de Leonor tomando el sol en bikini con sus compañeros en una playa de Montevideo. Incluso se llegaron a difundir imágenes de las cámaras de seguridad de un centro comercial, un delito, ya que vulnera la privacidad e intimidad de la persona por muy princesa que sea.
Leonor no está bien anímicamente
En su última aparición en Valparaíso, Leonor se mostró mucho más triste. Anímicamente no está bien y Casa Real ha puesto a su disposición a un grupo de psicólogos para que no se rinda y termine el viaje. Aunque ella intente ayudar, uno de sus problemas ha sido Letizia por el excesivo control. Llama a su hija unas cinco veces al día cuando está en puerto. Quiere saber en todo momento dónde está con quién y cómo se encuentra. Incluso sigue a diario la navegación a tiempo real del buque escuela. Letizia hace llorar a su propia hija, se siente presa, muy agobiada, con una gran ansiedad y gran parte de la culpa es de su madre. Quiere que no la controle, como al resto de compañeros.
