Leonor es la gran protagonista en cada una de sus apariciones, eclipsando plenamente a Letizia. Con la joven se ha desatado la Leonormania. Casa Real ha seguido bien sus pasos, ha alejado a la princesa de los Borbón y los ciudadanos le han dado un voto de confianza. Con ella la corona tiene cuerda para rato, está más que garantizada su continuación. Nunca le costó tan poco a la reina superar a la emérita. Pero su camino no ha sido fácil.
Felipe y Letizia han intentado que Leonor sea una adolescente más y pueda saborear todas las etapas de su vida sin condicionamientos. Por este motivo han intentado que hasta los 18 años su labor en la institución sea reducida, prácticamente nula. Pero al jurar la Constitución ha cobrado un gran protagonismo. El pasado fin de semana fueron sus primeros premios Princesa de Asturias con la mayoría de edad y concedió ella misma el discurso de clausura redactado por Letizia y que antes recaía en su padre. Cada vez adquiere más protagonismo.
Letizia exige demasiado a Leonor en los actos institucionales
Sin embargo, en sus actos todavía se pone muy nerviosa. Recae mucho peso sobre ella y se le ha adquirido una responsabilidad totalmente innecesaria en la actualidad. Con Letizia preparó todo el acto una semana antes, infinidad de ensayos y correcciones para que no hubiese ningún error. La monarca es perfecta y quiere que todo salga bien. Exige demasiado a su hija y esto le provoca ansiedad y estrés.
Muchas personas podrían pensar que ser reina es fácil, pero es más complicado de lo que parece. Se tienen muchas responsabilidades y obligaciones y tu vida nunca será privada. Leonor no ha podido disfrutar de una niñez ni adolescencia como la de sus compañeros. Por ello, acude al psicólogo todos los meses, les dan pautas para esta vida que les ha tocado vivir sin elección, porque en el caso de Letizia fue ella quien se unió a esa vida.
Leonor ha sufrido muchas humillaciones por parte de Letizia, aunque su madre lo haya hecho de forma inconsciente. Se ha sentido inferior y cree que comete demasiados fallos, no llega a ese nivel de exigencia tan elevado. Ha minado su autoestima, y es la principal culpable de los problemas de la princesa con la alimentación Ese estrés y ansiedad hace que coma más y de peor calidad.