El rey Felipe VI ha padecido dos enfermedades que la Casa Real ha preferido no explicar en detalle: la onicofagia y la narcolepsia. Y la princesa Leonor, la heredera al trono, podría estar enfrentando desafíos similares a uno de ellos, según informaciones vertidas por compañeros de la joven en la Academia Militar.
La onicofagia, conocida comúnmente como el hábito de comerse las uñas, es un problema bastante común. En numerosas imágenes del rey, se pueden observar sus dedos con tiritas o heridas provocadas por este hábito. Sin embargo, es la narcolepsia, una condición mucho menos conocida, es la que tuvo un impacto más significativo en su adolescencia.
Jaime Peñafiel reveló que el rey Felipe VI padece narcolepsia
Jaime Peñafiel ha hablado públicamente sobre la narcolepsia de Felipe en una ocasión. Describió cómo, a los dieciséis años, Felipe era un joven con dificultades académicas y personales, caracterizado por una somnolencia extrema que le hacía quedarse dormido incluso estando de pie. "Felipe con dieciséis años era un niño mal criado, flojo en sus estudios, con faltas de asistencia y puntualidad en sus obligaciones escolares, déspota y con un gran problema añadido: el sueño. Estaba pasando una mala racha, un mal momento, quizá como consecuencia de su crecimiento, de su pubertad, lo que provocaba cierta vagancia, somnolencia y falta de interés en general. Se quedaba dormido hasta de pie. Sobre las siete y media de la mañana, la primera labor era despertarle de su habitualmente pesado sueño con toda clase de artimañas. Si le impartían clases sentado, Felipe se dormía. De modo que recomendó asistiera a las clases de pie, aunque sin apoyarse, porque, de lo contrario, también se dormía. Me extraña que el equipo médico de la Casa Real no se ocupara de estos episodios del sueño, que podría deberse a un trastorno llamado narcolepsia, un sueño sin previo aviso que suele manifestarse, estés donde estés y en cualquier lugar", comentó Peñafiel.
La narcolepsia es una condición crónica que provoca períodos de somnolencia diurna extrema y episodios súbitos de sueño profundo. No tiene cura, pero existen tratamientos para paliar sus síntomas. Esta enfermedad puede llevar a que las personas afectadas se queden dormidas en cualquier lugar y en cualquier momento sin previo aviso.
Leonor podría haber heredado la enfermedad de su padre
Una enfermedad que, según informaciones vertidas por algunas fuentes, podría haber heredado la princesa Leonor. Según han revelado fuentes internas de la academia a Monarquía Confidencial, Leonor se ha dormido en ocasiones en clase. "Alguna vez se duerme en clase”, apunta la fuente mencionada, que también aseguró que “sus calificaciones no han sido tan altas como se esperaba”.
La posibilidad de que Leonor padezca narcolepsia está planteando preguntas sobre su capacidad para asumir futuras responsabilidades como reina. La Casa Real tendrá que abordar este asunto con la misma discreción y cuidado con que manejaron la situación de Felipe. La princesa tendrá que aprender a manejar esta presunta condición como lo ha hecho su padre. La atención médica adecuada y el apoyo institucional serán cruciales para que Leonor pueda cumplir con las expectativas y responsabilidades que recaen sobre ella como futura reina de España.