Leonor está teniendo serios problemas de salud mental. Este viaje a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano están provocando en ella pesadillas. En vez de vivir la experiencia más enriquecedora de su vida, ahora mismo es un verdadero infierno. A diferencia de Juan Carlos I y Felipe VI, en pleno siglo XXI cualquier persona puede hacer una fotografía con teléfonos móviles y es muy complicado evitar que aparezca en segundos en las redes sociales. Aunque hay cinco escoltas a cargo de la seguridad de la princesa, se turnan, no pueden controlar todas las fotografías.
Ya no hablamos de los problemas de Leonor a bordo del buque escuela por primeriza. A diferencia de sus compañeros, a ella se le ha adaptado el programa para poder estar en los tres ejércitos en tres años, y no tenía formación previa. Por ello, los primeros días fueron muy complicados. Padeció vómitos y mareos. Incluso sufrió algunas caídas por el fuerte oleaje que la golpeó en una de sus guardias. Pero lo peor está cuando abandona el buque escuela por los días libres que les pertenecen.
Leonor, como el resto de sus compañeros, aprovechan para hacer turismo por las ciudades que visitan. En Brasil estuvo en una fiesta previa a los carnavales, con tal mala suerte que en el evento que eligieron había un fotógrafo, que al visionar las imágenes se dio cuenta que estaba la princesa de España en ellas en buena compañía. Muchos medios de comunicación le adjudicaron un nuevo romance. En Montevideo las cámaras la siguieron hasta una playa prácticamente desierta. Tomó el sol en bikini con unos amigos, y se desconoce el motivo verdadero por el que Casa Real consiguió frenar esta instantáneas.
Letizia no quiere que nadie sepa que Leonor bebe alcohol y fuma
Pero la gota que ha colmado el vaso ha llegado cuando se han filtrado unas imágenes de las cámaras de seguridad de un centro comercial, a las que solo pueden tener acceso la policía y un juez mediante una denuncia. Con ello se ha vulnerado la privacidad e intimidad de la princesa y Zarzuela ha denunciado para demostrar que no todo vale.
Sin embargo estas imágenes no habrían sido el verdadero enfado de Letizia, ya que en ellas, aunque se vulnera la privacidad e intimidad de su hijo no se ve absolutamente nada extraño, más allá de una chica joven con unos amigos dando una vuelta por un centro comercial. Lo peor es una fotografía que hizo una persona anónima con su teléfono móvil en un pub de Punta Arenas. En la imagen se ve a la futura reina muy molesta mientras sujetaba una jarra de cerveza en la mano.
Se ha descubierto que Leonor bebe alcohol, como su madre cuando estaba de fiesta por México, la historia se repite. El mal hábito de las Ortiz Rocasolano, incluso también se dice que podría fumar a escondidas.
