La vida saludable y el cuidado por una alimentación balanceada han sido principios fundamentales en la educación de la princesa Leonor y la infanta Sofía, inculcados por su madre, la reina Letizia. Desde temprana edad, Letizia ha procurado que sus hijas mantengan una dieta rica en nutrientes y eviten los alimentos procesados y poco saludables. Sin embargo, parece que hay aspectos de la vida de Leonor que, desde que cumplió la mayoría de edad, escapan al control materno.
Contrario a la postura de Letizia, quien se declara antitabaco y anti alcohol, Leonor ha mostrado un interés por disfrutar de algunas bebidas alcohólicas, especialmente en sus salidas nocturnas durante los fines de semana. A pesar de las restricciones impuestas en la Academia Militar de Zaragoza, donde estudia, que prohíben el consumo de alcohol entre los cadetes mientras estén en ella, los fines de semana ofrecen libertad para que los estudiantes, incluida Leonor, se permitan algunos excesos. Y es que a Leonor, como a cualquier joven de su edad, también le gusta pasarlo bien.
Leonor, la reina de la noche en Madrid y en Zaragoza
Tal y como han asegurado varios medios en los últimos meses, numerosos testigos han visto a Leonor bebiendo bebidas con alcohol en sus salidas nocturnas de fin de semana tanto por Madrid como por, sobre todo, la zona universitaria de Zaragoza. Entre otras, vino, cerveza o vodka con limón, una de las bebidas que más le gusta. Aunque la cosa no se queda solo en una copa de vez en cuando para pasar la noche. Ni ella ni sus compañeros de ocio nocturno son de los que pasan desapercibidos. Van con todo.
Según la periodista Nuria Marín, Leonor fue vista en un bar de ambiente universitario de Zaragoza, el pub Kokoro, donde estuvo jugando a los típicos juegos de beber que suelen practicar los universitarios para ponerse a tono antes de salir de fiesta. Concretamente, habría estado jugando al ‘Beer Pong’, un juego que combina cerveza o vino y ping-pong.
Para quienes no lo conozcan, el ‘Beer Pong’ es un juego popular entre los universitarios que combina habilidad y consumo de vino o cerveza. Los participantes se dividen en equipos y tratan de encestar una pelota de ping pong en los vasos de cerveza del equipo contrario. Cuando lo logran, el equipo rival debe beber el contenido del vaso.