Son muchas las fuentes que apuntan a los retoques estéticos de la reina Letizia. Y aunque la consorte nunca haya reconocido haber pasado por el quirófano, los cambios en su rostro a lo largo de los años hacen evidente que la reina se ha puesto en más de una ocasión en manos del cirujano plástico.

Especialistas aseguran que Letizia se ha sometido a sesiones de bótox, así como se ha retocado los pómulos, la barbilla, las orejas o la nariz. Intervenciones que demuestran que Letizia no estaba contenta con su físico y de dejó vencer por los complejos.

Cabe decir que uno de los rasgos que menos gustaba a la reina Letizia era su nariz. Tal y como se puede ver en las comparaciones del antes y el después, la esposa del rey Felipe VI ya no luce aquella nariz de forma aguileña que mostraba cuando presentaba los informativos de Televisión Española. Ahora presume de una nariz más delicada y perfilada.

La reina Letizia antes yu después de la rinoplastia

La otra nariz que pone de los nervios a la reina Letizia

Pero su nariz no es la única que no le gustaba a Letizia. Hay otra nariz que le cuesta mirar demasiado rato. Concretamente, la nariz de su hija, la princesa Leonor. Un complejo que no afecta en absoluto a la futura reina. De hecho, a la joven no le molesta. Es a Letizia a quien pone de los nervios. Letizia incluso le ha aconsejado que haga como ella y se opere. Pero Leonor, por el momento se niega. Veremos más adelante.

El motivo de que Letizia no le guste la nariz de su hija es que Leonor ha heredado la nariz de su abuelo, el rey emérito Juan Carlos I, a quien la reina Letizia no puede ni ver. Para Letizia, este rasgo no solo representa un complejo estético. Es mucho más que eso. Es un recordatorio constante de los escándalos y problemas asociados con la monarquía española generados por Juan Carlos I. Y también la forma en que fue tratafda cuando entró en la realeza. La nariz de Leonor evoca recuerdos incómodos para la reina, lo que agrava su incomodidad con este aspecto físico.

Leonor GTRES

La princesa Leonor no quiere operarse

La reina Letizia no es la única que ha reparado en este detalle. El cronista real Jaime Peñafiel se ha referido a este tema, señalando que Leonor es una niña hermosa, excepto por su nariz, la cual considera claramente de origen borbónico. "La heredera es muy bonita siempre que no te fijes en la nariz. Tanto de frente como de perfil. ¡Puro Borbón!", escribió en LOC.

A diferencia de su madre, Leonor aún no ha recurrido a la cirugía plástica para corregir su nariz. A diferencia de su madre, está encantadísima con su apariencia física. No está pendiente de si tiene algún defecto o si luce algún kilito de más. Le da absolutamente igual. De momento no se espera que se someta a procedimientos estéticos mientras esté en la Academia Militar. El tiempo dirá si seguirá los pasos de Letizia o si abrazará con orgullo sus rasgos físicos tal como son.