Punto final al maratón de cinco actos oficiales de Leonor en tres días en Asturias y el resultado es un correcto 6. Un bien. Ni notable ni suspendida. Tenía que ser la gran semana de la princesa, primera vez que preside sus premios en Oviedo siendo adulta. El jueves que viene la princesa cumplirá 19 años y ya empiezan los rumores que el próximo año la reina Sofía no asistirá al palco de estos premios y que Letizia pasará a ocupar el lugar de su suegra entre el público porque en la mesa presidencial ya solo se sentarán Felipe y Leonor, que cerrará el acto. Mientras Letizia roe este hueso, Leonor ha hecho un buen papel excepto al final. Estuvo correcta en el acto solitario en las instituciones asturianas, acompañada de la familia en el concierto previo, al día siguiente recibiendo a los galardonados con unas medias muy extrañas, y la pifia fue durante el acto principal: la entrega de premios. Leonor estuvo nerviosa leyendo el discurso larguísimo que le habían escrito, se equivocó en algunas palabras largas, para disgusto de Letizia y al acabar, estaba tan obsesionada en buscar el visto bueno de su madre que tuvo una descortesía con la reina Sofía. Un vídeo que difundió Pilar Eyre y que en menos de 24 horas ya acumula más de 3,6 millones de visionados. Media España ha visto este momento de "Madre mía":
A Leonor le hicieron escribir: "Para los que estamos a punto de abandonar la adolescencia". Esta es una buena pista de cómo ven a la princesa desde dentro de la Zarzuela. No existe ni una sola persona que a punto de cumplir 19 años, habiendo disfrutado de su primer año como adulto, mayor de edad y ciudadano con plenitud de derechos, se considere a sí mismo como un "adolescente". En Zarzuela creen que teen, adolescente en inglés, llega hasta los nineteen, los 19 años. Es un despropósito constitucional: Leonor ya puede ser reina porque es adulta a todos los efectos. Pero la tienen tan aterrorizada con el error que cuando acaba el discurso solo busca a su madre, como Heidi buscaba a la Señora Rottenmeier, la institutriz. El caso es que 4 millones de ciudadanos han visto la tensión dentro de la familia, cómo Leonor ha vuelto a tener un mal gesto con la emérita y Zarzuela ha tocado a rebato. Para el quinto y último acto oficial, la visita a Sotres el pueblo ejemplar en los Picos de Europa, han obligado a Leonor a acercarse a las señoras mayores del pueblo, que nadie la pueda acusar de manía a la Tercera Edad. Pero con una pifia monumental. Según ha revelado la TV asturiana, la señora anciana ha confesado "Ni sabía que era la reina".
La escena, forzada, recuerda cuando Zarzuela después de los incidentes con la reina Sofía en la Catedral de Palma, viendo el alboroto de la guerra de reinas y del manotazo a la abuela, obligaron a Leonor a abrir la puerta del coche de Sofía y a caminar cogida de la mano de la emérita. La tensión de la Familia Real cuando pasan tres días seguidos juntos era palpable por las calles del pueblecito asturiano de 108 habitantes. Una periodista le ha preguntado a Letizia si este será el último año que la reina irá a los Premios princesa de Asturias y dejaría que los protagonizara Leonor sola, cómo acabó haciendo el príncipe Felipe de adulto. Letizia ha respondido de mala leche: "Ya veremos". Queda claro que costará obligarla a dar un paso al costado. La tensión ha sido ya indiscutible cuando otra periodista ha insistido, como era su obligación buscando la noticia, y Letizia, que es periodista, pero ya se le ha olvidado, ha contestado maleducada: "Ya me lo ha preguntado antes tu compañera".
El lugar era idílico, la mañana soleada, las niñas estaban guapas y bien vestidas, pero Letizia haciendo de Letizia. Queda claro que la Familia Real es como todas las familias por vacaciones o por Navidad: cuando llevan tres días seguidos juntos están hartos, surgen tensiones y solo desean que todo termine ya.