Máxima de Holanda no se cansa de dejar en evidencia a Letizia. La reina, argentina y casada con el rey de los Países Bajos, ha conseguido hacer olvidar a su padre próximo a la dictadura y sus orígenes plebeyos. La corona le queda como un guante. Máxima es, de mucho, la reina europea consorte que más disfruta de su trabajo y la que mejor la sabe ejercer: próxima, auténtica y más carismática que su marido, un Guillermo de Holanda consciente del tesoro que tiene en cada para preservar la imagen de la monarquía. Totalmente a la inversa que Letizia, arisca, operada, que ve su condición como un trabajo de 9 a 5 y a la cual nunca se lo ha visto disfrutar de ser reina. Ni a la hora de vender el pescado su hija mayor la heredera, la princesa. Mientras Letizia oculta a Leonor, no explican qué hace, con quién va o cómo le va, Máxima exhibe a Amalia de Holanda, coetánea de Leonor y futura reina de los holandeses. Por primera vez los reyes y la princesa, solos los tres, de viaje oficial al Caribe. Unas fotos que hunden a Zarzuela, los reyes Guillermo y Máxima y la princesa Amàlia meándose de risa, naturales, maravillosos, imposible en Felipe y Leonor e impensable en la tiesa Letizia:
Las imágenes hablan solas. En Zarzuela no entienden que Leonor es la única baza que les queda para ganar a la opinión pública. Felipe está chamuscado, Letizia no ha llegado nunca al corazón y al alma de los monárquicos y a la hija, la gran esperanza blanca, la esconden encerrada en un internado. Amalia tiene problemas de sobrepeso, hay grupos mafiosos que la amenazan, está viviendo un paso en el mundo adulto difícil, pero la lucen, espléndida, natural, con gafas de sol, abrazada en los caribeños y disfrutando de la vida lejos de actos oficiales encorbatados y formales. Amalia superstar, con solo unos meses más de edad que la misteriosa y encerrada en ella misma Leonor.
La foto es inimaginable en España. Primero porque todas las monarquías europeas tienen cuenta de Instagram excepto España. Si la Corona es imagen, qué mejor que la red de las imágenes. En Zarzuela todavía van con tren d evapor. Piensan que Instagram es una marca de píldoras para perder peso. Y la foto, los reyes y la princesa holandeses en Bonaire, una isla en las costas de Venezuela al sur del Caribe y que pertenece a Holanda, entre surferos y holandeses caribeños. Amalia se abraza a todos. Leonor no toca a nadie ni con un palo.
Según la revista Hola, "Este tour, que va a durar dos semanas, es el primer viaje oficial de la heredera, que desde que alcanzó la mayoría de edad ha adquirido un compromiso mayor con sus deberes reales, y tiene como principal objetivo su presentación en los territorios caribeños. Una travesía trasatlántica marcada por una agenda de lo más exigente, puesto que la princesa Amalia tendrá que acudir a alrededor de setenta actos". Amalia se está ganando la Corona. Leonor dicen que ha vuelto a visitar España de incógnito por el cumpleaños de su padre y para visitar al dentista. Ni fotos, ni información, ni contacto con la gente, ni gafas de sol, ni abrazos ni nunca, nunca, nunca, reír en público con Felipe y Letizia.
Máxima minimiza a Letizia y Amalia empequeñece a Leonor. ¿Los responsables? Los de siempre, los altos funcionarios de Zarzuela mal supervisados por Felipe y Letizia.