Letizia ha conseguido apartar a toda su familia de los Borbones. En 2003, Felipe la presentó como su nueva novia. El príncipe de Asturias estaba ilusionado y le pidió la mano. Juan Carlos y Sofía no la vieron con muy buenos ojos, aunque el hermano de Elena y Cristina tenía claro que en esta ocasión no iban a truncar su futuro matrimonio. Estaba convencido que la asturiana iba a ser la mujer de su vida. Una plebeya, divorciada de su profesor de instituto, de padres separados y presentadora de informativos. Un completo desastre para la monarquía española. Sin embargo, demostró que reina no se nace, se hace. Ha conseguido eclipsar a Sofía, una sombra demasiado alargada.

Felipe y Letizia con Sofía

La reina juró que se vengaría de toda la familia y lo hizo. Aprovechó la ocasión del caso Nóos, cuando salieron salpicados. Como medida para salvar la corona, obligó a Felipe a expulsarlos de Casa Real, a Juan Carlos a su abdicación, les quitó todas sus funciones institucionales, ya no representaban a la corona ni tampoco percibían un sueldo de los Presupuestos Generales del Estado. El emérito culpa a la mujer de su hijo como la culpable de todos sus males, también es quien decidió exiliarlo a Abu Dabi.

Ya nunca se volverán a ver aquellas fotografías donde toda la familia posaba sonriente ante la cámara en el palacio de Zarzuela o en el de Marivent. La familia está completamente rota. Felipe y Letizia intentan no coincidir con ninguno de ellos. No acudieron a la boda del príncipe Hussein en Jordania a pesar de la amistad que les une y obligaron a Juan Carlos y Sofía a declinar su invitación a la coronación de Carlos III. Tampoco invitaron a los abuelos a la graduación de Leonor, y a la confirmación de Sofía solo a la emérita.

Leonor, cada vez más alejada de la familia de Felipe 

Letizia es una mujer muy ambiciosa, perfeccionista, controladora, fría y calculadora. Esa es la imagen que da de cara al resto de españoles. Tiene claro que debe preservar la corona para que en un futuro su hija Leonor pueda ser la próxima Jefa de Estado. Para ello se está preparando. Por este motivo, no quiere que nada se interponga en su camino. Es la reina quien ha decidido que la princesa de Asturias no tenga ninguna relación con sus abuelos paternos ni con sus tías ni primos. No los ve desde hace años. La relación es totalmente nula, como explicó Victoria Federica en una de sus entrevistas.

Cuando era pequeña, como el resto de familiares, y como continúa haciendo Felipe, Leonor visitaba a sus abuelos en Zarzuela todas las mañanas antes de irse al colegio y por las tardes cuando regresaba. Hacía la obligatoria reverencia que manda el protocolo, pero ahora ya ni ve a su abuela.

 
el gesto de Letizia con leonor por sofia