Como bien saben todos aquellos que siguen atentamente de la actualidad de la casa real española, en los últimos meses no ha sido otra que la princesa Leonor la que se ha convertido en una de las verdaderas protagonistas. Y es que, si bien es cierto que hacía muchos años que el foco está centrado en la que será la futura reina, desde que cumplió la mayoría de edad sus actos públicos se han multiplicado, y con ellos el foco y la atención mediática.
Y es que cabe tener en cuenta que la institución son muy conscientes de que, por mucho que el rey Felipe y la Reina Letizia estén muy bien valorados en nuestro país, y el miembro mejor valorado de la institución actualmente es la futura reina, de ahí que desde la casa real se está intentando potenciar su imagen al máximo.
Eso sí, como no podía ser de otra forma y como ocurre también con el resto de miembros de la institución, la princesa Leonor va a disfrutar en los próximos días de un periodo de tranquilidad y de calma, un periodo de vacaciones en el que estará alejada de los focos y podrás disfrutar de la tranquilidad de no tener ningún acto público.
Las vacaciones premium de la princesa Leonor
Una princesa Leonor que, si bien es cierto que deberá acudir al cuartel de Marín, en Galicia, para conocer las instalaciones donde cursará sus futuros estudios de instrucción militar naval, no será hasta el próximo 24 de julio cuando acudirá a Mallorca para reunirse con el resto de su familia en tierras mallorquinas, por lo que ahora tiene unos días de vacaciones.
Evidentemente en la casa real no han dado ningún tipo de detalle sobre cuál va a ser el destino de la princesa en estos días, pero no son pocos los que aseguran que, tal y como ha ocurrido en años anteriores, la idea de la instituciones que la princesa pase unos días en un lugar inaccesible para los paparazzi.
Las informaciones en este sentido apuntan a que uno de los posibles destinos sería o bien en un enorme yate en alta mar o bien alojarse en un hotel flotante a un precio de unos 6000 € al día, aunque evidentemente es una información que desde la institución no van a compartir, entre otras cosas porque, más allá de intentar preservar la intimidad y la tranquilidad de la princesa, también están en juego todo lo referente a la seguridad.