En un inesperado giro de los acontecimientos, la princesa Leonor, futura heredera al trono, ha tomado la decisión de reconectar con su abuelo, el rey emérito Juan Carlos I. Este movimiento no solo ha causado sorpresa en la Casa Real, sino que también ha sido un duro golpe para la reina Letizia, quien ha sido una de las principales defensoras de mantener a Juan Carlos al margen de los asuntos familiares tras su exilio en Abu Dabi.
Desde la salida del rey emérito en 2020, las relaciones entre él y su familia han sido, como mínimo, tensas. Durante años, Felipe VI mantuvo a su padre alejado de los focos, limitando sus apariciones públicas y vetando cualquier posibilidad de un encuentro mediático con Leonor, para evitar que la figura de Juan Carlos I pudiera dañar la imagen de la Corona. Sin embargo, las últimas acciones de la joven princesa parecen desafiar esta postura estricta.
Leonor quiere aprovechar la visita de su abuelo Juan Carlos I a España para tener un encuentro
A finales de septiembre, Juan Carlos I tiene planeado uno de sus frecuentes viajes a Sanxenxo, localidad gallega que se ha convertido en su refugio favorito durante sus visitas a España. Allí, participará en la Regata Rey Juan Carlos I El Corte Inglés Máster 2024, un evento en el que el emérito ha encontrado la oportunidad de seguir siendo una figura cercana a sus amigos y allegados, lejos de los controles de Zarzuela. Lo que nadie esperaba es que su nieta Leonor haya expresado el deseo de reunirse con él durante su estancia en Galicia, rompiendo así con la distancia impuesta por su familia y desmarcándose de las tendencias familiares.
Leonor, quien actualmente cursa su formación militar en la Escuela Naval de Marín, ubicada a solo 40 kilómetros de Sanxenxo, ha decidido no dejar pasar la oportunidad de retomar el contacto con su abuelo. Esto supone un duro golpe para Letizia, siempre firme en su postura de mantener a Juan Carlos fuera del núcleo familiar para proteger a la institución de posibles críticas y escándalos que aún persiguen al rey emérito. Su figura y peso en la corona, sin embargo, han quedado debilitados en los últimos meses. Y con esta petición, Leonor también se aleja de los deseos de la reina.
Leonor también se aleja de la reina Letizia
Para el emérito, este gesto de su nieta representa un respiro. Tras años de estar alejado de sus seres queridos, la posibilidad de ver a Leonor es una oportunidad única de reconectar con su familia, especialmente con la futura reina de España. Aunque hasta ahora los encuentros entre ambos han sido limitados y controlados por el protocolo, este acercamiento privado podría marcar el inicio de una relación más cercana entre abuelo y nieta.
La decisión, sin embargo, no es solo de Leonor. El peso de este encuentro recae en Felipe VI, quien, aunque ha intentado suavizar las tensiones con su padre, sabe que una imagen de Juan Carlos I junto a la heredera al trono puede ser interpretada como un guiño hacia la rehabilitación de su figura, algo que la Casa Real ha tratado de evitar a toda costa.