La princesa Leonor, quien ha sabido ganarse la simpatía de muchos por su carácter cercano y campechano, entre sus compañeros de la Escuela Naval de Marín. Desde su ingreso, Leonor mostró una faceta que sorprendió a más de uno: su gusto por la diversión y la vida social. Pocos se esperaban que la princesa pudiera ser tan cercana y abierta.
No solo eso. A Leonor, como a su abuelo Juan Carlos I, le gusta la fiesta. Ya en Zaragoza se le vio frecuentemente en locales de ocio de la ciudad aragonesa, compartiendo momentos con otros cadetes en restaurantes, discotecas y bares de la zona universitaria. Y en Marín, esta costumbre no ha cambiado. Apenas unos días después de su ingreso en la escuela naval, ya se la pudo ver en los lugares más concurridos de Pontevedra, disfrutando de la noche gallega como una joven más.
La princesa Leonor no renuncia a los placeres de la juventud
Entre sus locales favoritos destacan el restaurante Tapería Bocatería D´Elvi, La Botica en la Plaza de Méndez Núñez y el pub Moncloa, conocidos por ser puntos de encuentro para los jóvenes en busca de buena comida y diversión. En palabras de quienes la han visto en estas salidas, Leonor es "muy juerguista y espontánea", disfrutando plenamente de su juventud.
Sobre todo en las últimas semanas. Porque Leonor, el próximo 11 de enero, se embarcará en el buque Juan Sebastián de Elcano, donde pasará seis meses navegando por aguas internacionales. Y antes de zarpar, la heredera quiere exprimir hasta la última gota del tiempo que le queda en tierra firrme. Estas ansias, sin embargo, le han generado algún problema.
Mal final en la cena de Navidad
Sin embargo, parece que las ansias de aprovechar al máximo su tiempo en tierra le jugaron una mala pasada en la reciente cena de Navidad. Según fuentes cercanas, la princesa comenzó la velada con entusiasmo, compartiendo risas y brindis con sus compañeros. Todo transcurría con normalidad hasta que, avanzado el evento, Leonor se sintió indispuesta. Se desconoce si algo le sentó mal o si se pasó con alguna copa de más, algo habitual en este tipo de celebraciones.
Ahora Leonor afronta unas fiestas navideñas en Madrid en las que pasará gran parte del tiempo con sus padres, Felipe VI y Letizia, y con su hermana. Aunque también ha organizado algunos planes con sus amigos cercanos. Como decíamos, lo necesario para no sentir que ha perdido el tiempo cuando le toque hacer el petate.