Leonor ya no es aquella niña que siempre estaba a las órdenes de Letizia. La princesa se prepara para su cargo, pero también quiere disfrutar de su juventud. Sabe perfectamente que no le ha tocado ser una adolescente normal y corriente como sus compañeros, pero en la medida de lo posible no quiere saltarse ninguna etapa de su vida. Por este motivo, a partir de la mayoría de edad quiso tomar sus propias decisiones. El pasado 31 de octubre celebró sus 18 años. Debido a sus estudios, por suerte, ha podido experimentar la sensación de libertad, independencia y anonimato. Estudió bachillerato internacional en el UWC Atlantic College de Gales a los 16 años. Y ahora le quedan dos años más de formación militar. El próximo mes de junio acabará la primera etapa en la Academia Militar General de Zaragoza con el ejército de tierra.

Leonor militar GTRES

El año pasado se publicó que Leonor había conocido a un chico en el internado de Gales, se trataba de Gabriel, un apuesto joven de nacionalidad estadounidense y brasileña. Sin embargo, la relación se truncó por la distancia. Él vive en Nueva York. No obstante, a día de hoy son amigos. En Semana Santa viajó para verle.

En los últimos meses, desde que ha cumplido la mayoría de edad, Leonor frecuenta muchas discotecas de Zaragoza, o incluso Madrid. Se la ha visto en muchas ocasiones, y sus padres ya le han advertido, debe contenerse porque todo lo que haga ahora le salpicará en el futuro y solo se acordarán de lo malo. Quieren que su imagen sea intachable, pero que tampoco pierda la naturalidad que la caracteriza y que tanto a encandilado a la ciudadanía.

Leonor Sofia GTRES

Leonor tiene un sitio especial para verse con amigos 

Cuando ingresó en el centro militar se anunció que a diferencia de sus compañeros, Leonor tendría una sala para disfrutar de ella en la intimidad. Para cambiarse, realizar llamadas, recibir visitas privadas, etc.

Sin embargo, cuando Leonor conoce a alguien especial o quiere reunirse con amigos, Casa Real ha alquilado una casa privada a las afueras de Zaragoza, totalmente discreta e íntima, donde la princesa podría verse con otros chicos sin que saliese en la prensa. Un lugar secreto que también habría frecuentado en el pasado Juan Carlos y Felipe.