Leonor, la princesa de Asturias, ha vuelto a ser el centro de atención al iniciar su formación en la Escuela Naval Militar de Marín, un paso más en su preparación militar que comenzó en la Academia General Militar de Zaragoza. Sin embargo, lo que realmente ha captado la atención en esta ocasión no es solo su ingreso en la prestigiosa institución, sino el hecho de que Leonor parece estar recurriendo a sus contactos para saltarse una de las normas más estrictas y inquebrantables de la escuela.
El pasado 29 de agosto, la hija mayor de los reyes Felipe VI y Letizia se incorporó a Marín, unos días después de la fecha oficial de inicio del curso. Vestida con los galones de guardiamarina de Primero y el uniforme de la Armada en su modalidad B, fue recibida con todos los honores por el comandante director Pedro Cardona y otros altos mandos. Tras firmar en el libro de honor, se reunió con el comandante de brigada Erik Muñoz, quien será su jefe directo durante los próximos meses.
La princesa Leonor ya forma con el ejército del mar
A lo largo de su estancia en Marín, Leonor participará en diversas actividades, desde instrucciones marineras hasta competiciones deportivas, en las que ya ha demostrado su valía. Zarpó en una instrucción marinera, así como participó en la competición deportiva inter brigadas, en la que la suya salió vencedora.
Además, recibió la insignia de alumna distinguida, un reconocimiento reservado para aquellos estudiantes que han sobresalido en sus calificaciones, instrucción y disciplina durante el año anterior. Este honor, aunque significativo, ha sido opacado por una controversia más notable: la condición especial de Leonor por ser la heredera de la corona de España, que le permite saltarse ciertas reglas que sus compañeros deben cumplir sin excepción.
El año pasado, en la Academia General Militar de Zaragoza, Leonor ya hizo uso de este privilegio para completar su formación en solo un año, mientras que los cadetes ordinarios necesitan dos años para lograr lo mismo. Un mes y medio después de llegar pasó directamente a segundo curso por ser quien es.
Leonor, permiso para salir y entrar cuando quiera
Ahora, en la Escuela Naval de Marín, parece que recurrirá a su estatus nuevamente para evadir una de las reglas más firmes de la institución: la prohibición de salir de la provincia de Pontevedra salvo en casos de urgencia o fuerza mayor. Para la mayoría de los estudiantes, esta norma es inflexible, pero no para Leonor, quien podrá viajar a Madrid cuando lo necesite, ya sea por actos institucionales o para visitar a su familia.
Este privilegio ha generado un cierto malestar entre sus compañeros, quienes ven en esta excepción un trato desigual que subraya las diferencias entre ellos y la futura reina de España. Mientras que los demás deben conformarse con permanecer en Pontevedra durante toda su formación, Leonor tiene luz verde para salir cuando lo desee, sin necesidad de ofrecer explicaciones más allá de su partida.