Letizia es una mujer muy calculadora y controladora, demasiado perfeccionista. Esta forma de ser ha hecho que a veces se vea muy alejada de la ciudadanía. Hace un tiempo se empezó una reconstrucción de su imagen para acercarla más al pueblo y de esta forma conseguir mayores apoyos de la corona. Con Leonor han conseguido la jugada perfecta. Han desvinculado a la princesa del apellido Borbón y no han querido sobreexponerla, todos los pasos han estado muy medidos. Ahora mismo es quien recibe la mejor valoración de los ciudadanos y aprueba con un excelente. El futuro de la institución está garantizado, pero sin Letizia.
Hace algo más de un año reapareció en su vida como un fantasma del pasado Jaime del Burgo. El abogado, que mantuvo una relación con Telma Ortiz, asegura que durante unos años mantuvo una relación extramatrimonial con la reina. Se vieron a espaldas de Felipe VI, una infidelidad que fue descubierta en 2012, momento en que los reyes vivieron una gran crisis y habría sido el verdadero detonante de su matrimonio.
Con esta campaña de desprestigio que podría estar orquestada por alguno de los interesados, como Felipe VI o Juan Carlos I, Letizia perdió mucho poder en la institución. Se quiere alejarla de la corona y dar más protagonismo al actual rey y a sus dos hijas.
Letizia no es muy querida entre sus empleados. Cuando cogió las riendas de la institución no dudó en establecer sus órdenes. Cambió todo lo que estaba establecido. La forma de trabajar era totalmente diferente.
Los escoltas de Letizia abandonan
Es cierto que algunos empleados de Zarzuela acababan exhaustos, muy cansados con sus órdenes, han abandonado muchos. Casa Real cambia constantemente de empleados y deben tener mucho cuidado ya que nadie puede contar lo que sucede en el interior del palacio.
Los escoltas de Letizia son los que más trabajan y más hartos están de ella, de su comportamiento y sus manías. Ya se dijo que intentaba seducirles en el gimnasio, pero es que también se cambia delante de ellos en el coche. Uno de los mayores problemas de higiene de la reina es el sudor. No tolera el sudor y siempre lleva ropa de recambio a todos los actos. A veces se cambia de vestido en el vehículo, especialmente cuando no tiene tiempo de detenerse en ningún sitio.
"Sus escoltas varones evitan acudir a la sala habilitada para hacer ejercicio cuando la reina está en Palacio porque a pesar de ser un lugar para empleados Letizia acude para dejarse ver y les pone nerviosos”. Dijo Joaquin Abad. Debido a la actitud de la reina, muchos escoltas han dejado de trabajar para los reyes. Se les hacía una situación muy incómoda e insostenible. Pidieron el traslado alegando “motivos personales”.
