Canarias, Baleares, Andalucía, Castilla la Mancha y ahora Comunidad Valenciana. La gira española de Felipe y Letizia ha escogido un lugar particularmente feo de los Países Catalanes: Benidorm. Será para llenar hoteles y rascacielos delante del mar pero hace temer que cuando vayan a Catalunya escojan Salou o Lloret. Las fotos son un poema a la fealdad:
Letizia tenía el guapo subido. Al día siguiente de estar en Cuenca pisando mierda de oca hoy tomaba el sol en look total pink, de las alpargatas en el vestido todo rosa. Y está guapa. De cerca pierde. Demasiada cirugía. El momento pifia ha llegado cuando han repartido banderas españolas entre los veraneantes y a los menores les entregaban banderitas españolitas mini. Una niña con gorra de Frozen se ha saltado el cordón de seguridad. No había que adoctrinar a menores así. Ningún niño va a la playa con una bandera de España.
Mucha bandera de España en la playa, nada espontánea sino repartida por Zarzuela. Ximo Puig sudaba y el ministro astronauta Pedro Duque parecía lo que es en el paseo marítimo: un astronauta. Letizia piensa que ya queda menos para acabar este martirio: 12 CC.AA (incluyendo Catalunya y Euskadi).