París parece la nueva casa de Letizia. Este verano está utilizando la capital francesa como excusa para no acudir a algunos eventos relacionados con la familia de Felipe VI, con la que no tiene muy buena relación, ni tan siquiera con su marido. Se habla mucho últimamente de la nula complicidad que existiría entre los reyes. Expertas en Casa Real afirman que habrían acordado el cese de la convivencia. Maica Vasco se atreve a hablar de un “matrimonio de conveniencia”, mientras que Pilar Eyre apuesta por “un equipo de trabajo”.
Son muchos los que creen que entre Letizia y Felipe ya no hay absolutamente nada. O nunca lo hubo. Las declaraciones de Jaime del Burgo han hecho saltar todas las alarmas. Y Casa Real no ha querido desmentir ni confirmar ninguna de esas afirmaciones, simplemente ha obligado a los reyes a dejarse ver juntos compartiendo planes para zanjar cualquier comentario.
Este verano ha sido uno de los más atípicos, y es cierto que los reyes solo han coincidido un par de días en todo el mes. Letizia viajó una semana a los Juegos Olímpicos de París para apoyar a los deportistas españoles, y un día después de su regreso lo hizo Felipe VI, así no tuvieron que compartir nada más que una cena familiar en Palma de Mallorca.
Letizia aprovecha los Juegos Paralímpicos para no ver a Felipe VI ni asistir a la boda
También se ha rumoreado que Letizia y Felipe no han pasado las vacaciones privadas juntos. Y justamente al recuperar la agenda institucional, la reina se marcha de nuevo a París para asistir a los Juegos Paralímpicos. Estará todo el fin de semana en la capital francesa, de esta forma tiene justificación para no asistir a la próxima boda de los Borbón, que se celebrará el próximo sábado 31 de agosto en Madrid, y a la que se ha confirmado la presencia de las infantas Elena y Cristina, así como sus hijos, y Felipe VI. Todavía se desconoce si acudirán Juan Carlos I y la reina Sofía.
Letizia es una mujer calculadora, fría y controladora. Siempre se la ha criticado por su carácter distante que la ha alejado de la ciudadanía, algo que Casa Real ha intentado solucionar en este último año haciéndose fotografías con los ciudadanos. Pero la madre de Leonor y Sofía no es nada cercana. La monarca ha vuelto a demostrar sus aires de grandeza en París. Como la reina Sofía, también tiene sus manías y no acepta cualquier habitación para hospedarse. En ocasiones, ha cerrado todo un hotel, o como mínimo una planta entera, y necesita un lavabo para utilizar solo y exclusivamente ella.
Es la embajada francesa la que se ha encargado personalmente de alojar a Letizia. Se la ha hecho suya, como si fuese la reina más importante del mundo.