Entre las dos fotos que abren esta noticia hay menos de una semana de diferencia. Hace 6 días, En Blau tituló el acto oficial de Letizia con un explícito "Letizia se acerca al pueblo: sin teñirse, falda de 13€ y acusada de zángana". La revista Hola pasa por ser el BOE de Zarzuela: todo lo que dice sobre los reyes va a misa. La portada de este miércoles les ha caducado el jueves:
La prensa de papel couché superada por la vertiginosa actualidad. Lo que el miércoles explicaba en primera plana Hola, "La reina Letizia apuesta por la naturalidad y presume de canas", al día siguiente es un yogur caducado. Letizia ya no apuesta por ser natural y de lo que presume es de tinte. El jueves ha protagonizado un acto oficial y se ha hecho las raíces y las puntas.
La prensa del corazón alternativa, Semana, escribe que se ha hecho un "bañito", sólo un poquito: "Parece haberse dado un bañito de color, ha camuflado esas canas que asomaron. Aunque ahora el pelo canoso o grisáceo también es tendencia, en ella, por muy natural que sea, causaba cierta extrañeza". Rectifica las alabanzas a la "naturalidad" de la revista de la competencia y parece reprocharle "Su Majestad: tíñase". En una semana Letizia ha cambiado como un calcetín: ahora parece de cera, brilla, y se le ha ido la mano con el efecto rejuvenecedor:
Ahora decidirán los súbditos, los contribuyentes que pagan el tinte y el bótox, qué Letizia prefieren pagar.