Juan Carlos no pasa por un buen momento. El emérito se encuentra en Abu Dabi, donde tuvo que exiliarse por petición de Felipe VI tras sus última polémicas. Aunque ha aparecido por España, París, Londres o Atenas, el marido de Sofía tiene muchas ganas de volver a su país, así se lo hace saber en todas sus conversaciones a su hijo.
El monarca ha acudido recientemente a los entierros de la reina Isabel II y el rey Constantino de Grecia. Juan Carlos I se encuentra perfectamente de salud a pesar de los problemas de movilidad. Sin embargo, es consciente de la edad que tiene y que cada día que pasa su final está más cerca. Al emérito le gustaría morir en España. Sería una deshonra para su imagen, pero también para la de Felipe VI que fallezca fuera del país. Quiere estar tranquilo al lado de los suyos.
Juan Carlos I sabe perfectamente que a Zarzuela no puede volver. No es una persona muy querida entre esas cuatro paredes y tampoco en España. Estuvo a punto de echar por tierra la corona, y no su hijo casándose con Letizia, como él creía. A la actual reina le hicieron el vacío y ahora se ha vengado de todos. Ella ha sido la encargada de reflotar la monarquía y de tomar todas estas decisiones estrictas. Por ahora Juan Carlos I no podrá volver a España, no de forma indefinida. Felipe VI espera un cambio de gobierno en las próximas elecciones para debatir el regreso de su padre. No obstante, parece que ha empezado un diálogo con Pedro Sánchez.
Juan Carlos I no estará esta Semana Santa en España
El próximo 18 de marzo, Sanxenxo celebrará sus conocidas regatas, donde compiten barcos de seis metros, entre los que se encuentra el Bribón, con el que participaba Juan Carlos I. Padre e hijo son adictos a este deporte. Hace unos meses se habló de la posibilidad del regreso del monarca solo para que pudiese competir en su barco, que se modificó para que pudiese llevar el timón sentado y sin esfuerzo.
Según Informalia, es poco probable que Juan Carlos I regrese a España este mes de marzo para participar en las conocidas regatas. El año pasado regresó a Sanxenxo y generó un gran revuelo entre los ciudadanos, y también un enfado con Pedro Sánchez. El propio Juan Carlos aseguró que regresaría en septiembre para otra regata, pero Casa Real se lo prohibió. Parece que en su visita a Sanxenxo, el emérito no consultó su viaje con su hijo y el presidente del Gobierno.
"Su uniforme estará aquí esperándolo", cuentan a Informalia, "aunque al verle más delgado que hace un año le hemos pedido sus nuevas medidas y resulta que ha bajado una talla”. Por ahora el emérito sigue en Abu Dabi y se quedará durante una larga temporada.