Todo parece indicar que Letizia y Felipe habrían roto su relación hace mucho tiempo, pero se ha hecho más evidente en los últimos meses. En este último tiempo, los reyes han dejado de fingir una buena relación, cada uno ha ido por su lado, y más sin la presencia de Leonor y Sofía en casa. Se inició una campaña de desprestigio contra la reina, y a partir de ahí fue el rey quien cogió poder y recuperó su presencia en la institución. Desde las declaraciones tan polémicas de Jaime del Burgo, se encarga de todos los actos institucionales, la reina ha quedado relegada a un plano totalmente desenfocado.
Según Jaime del Burgo, la reina habría sido infiel al rey con él durante varios años. Zarzuela llevaba este asunto en la más absoluta discreción, hasta que todo se ha hecho público. Tras conocerse toda la verdad, Felipe se ha apartado totalmente de Letizia y ha iniciado una vida paralela. Expertas en Casa Real como Pilar Eyre aseguran que el matrimonio está totalmente roto desde hace muchos años, mientras que Maica Vasco asegura que siempre han sido un matrimonio de conveniencia, ahí no ha existido ningún amor.
Felipe y Letizia, vacaciones separadas
Este año ha sido el más atípico de todos. Por un lado, Felipe VI se ha marchado todos los fines de semana fuera de Zarzuela para alejarse de Letizia, con quien la relación en estos momentos no es la mejor. Y estas vacaciones tampoco han sido las más familiares. El rey ha preferido separarse de su mujer y hacer vacaciones por su lado.
Letizia se marchó de Palma de Mallorca en la lujosa embarcación de 6.000 euros diarios que alquilan todos los días para marcharse a las islas griegas. Estuvo acompañada de sus dos hijas, Leonor y Sofía, y se añadieron algunas amigas y amigos. La reina sin el rey es más feliz, no tiene por qué comportarse con protocolo, y menos en unas vacaciones privadas e íntimas.
La reina cuenta con todo tipo de personal a bordo, seguridad, servicio, cocina, además de todas las comodidades. Van de isla en isla pero se acercan a playas más desiertas. Normalmente hacen vida en el barco, de esta forma evitan que sean descubiertos. Algunos dicen que la reina se embarcó con ese amigo especial del que tanto habla la periodista Laura Rodríguez, un conocido empresario.