Letizia, del fútbol a los desfiles militares en menos de 48 horas. La reina no baja del trono y sigue presidiendo actos muy lejos de los desfavorecidos. Loable que dé apoyo al deporte femenino, pero en el desfile por los 175 años de la Guardia Civil no era necesaria. El jefe de las Fuerzas Armadas es su marido y la reina ni es militar ni lo hace ver. Pero Zarzuela no desperdicia la ocasión para ofrecer una imagen de los reyes unidos por las FF.AA. El álbum de fotos es el de una determinada España. La primera es la más significativa:
Sombreros de España, señoras peripuestas y agentes con bigote. Sobredosis de españolidad que contrasta con la sobriedad de Letizia. La prensa insiste en que el traje la hace más delgada, como si le hiciera falta, y le critican un look sin estridencias. Los que esperaban un guiño al verde guardia civil o al rojo españa se han visto decepcionados. Entre ellos el diario El Mundo que publicó que "Letizia considera que cualquier manifestación de españolismo es políticamente incorrecta". Una denuncia sorprendente de su experto Carlos García Calvo: "Letizia ha evitado cualquier manifestación folclórica o racial. La mejor forma de mantenerse en forma es bailando sevillanas, para adelgazar y tener los brazos bien torneados como le gustan". El unionismo echa de menos que Letizia baile flamenco como Inés Arrimadas.
Nunca hemos visto una Letizia flamenca. En cambio la última fotografía es muy española: dirigiéndose al guardia civil como una señora a un camarero a la hora del aperitivo: "unas aceitunas y un bitter".