La vida de la reina Letizia antes de entrar en la Zarzuela estuvo lejos de ser un cuento de hadas. En realidad la consorte se lo pasó en grande. Pero muchos de los episodios que protagonizó no son dignos de una reina. No serían escenarios en los que podamos imaginar a la princcesa Leonor.  

La llegada de Letizia a la Casa Real no fue del todo sencilla. Los reyes eméritos, Juan Carlos y Sofía, tenían sus dudas sobre la futura reina. La elección de su hijo, Felipe, para casarse con una "plebeya con pasado" como Letizia no estaba en sus planes. El emérito se mostró especialmente reticente, deseando que su hijo se emparejara con alguien de las altas esferas. 

El pasado de la reina Letizia está lleno de anécdotas imprescindibles 

Ese ‘pasado’ se refiere a la vida "bohemia y salvaje" de Letizia, que incluye episodios como los que han contado cronistas especializados en la casa real, como Jaime Peñafiel y Pilar Eyre, como cuando reocrría los campings de la Costa Brava haciendo autostop, mientras tenñia una "vida sexual muy activa". También, su primo David Rocasolano reveló algunos episodios curiosos en su libro "Adiós, princesa," incluyendo uno relacionado con la eliminación de documentos relacionados con su aborto, en colaboración con Felipe

Felipe y Letizia efe

Pero no debemos obviar un incidente que el periodista catalán Isidre Cunill mencionó en su libro "Letizia Ortiz: una republicana en la corte de Juan Carlos I." En este libro, Cunill también habla sobre el mencionado aborto de Letizia en 1996 en México. Parece que lo sabía todo el mundo menos sus suegros. Pero a lo que nos referimos en esta ocasión es a la relación de Letizia con las drogas. 

Detenida por posesión de hachís 

Según Cunill, Letizia fue acusada de consumir drogas durante su época de estudiante mientras mantenía una relación con un profesor, Alonso Guerrero. El escritor menciona el hachís. No sería la droga más dura, pero no deja de ser un estupefaciente ilegal en la mayoría de países. "Durante la etapa del instituto comienza su noviazgo con el profesor Alonso Guerrero Pérez... y es detenida por posesión de hachís", escribe el autor. Algo que podría haberle reportado una pena de prisión y una importante multa económica. 

Según el Ministerio de Sanidad, la tenencia y el consumo de hachís puede comportar penas de prisión de entre 1 y 3 años, así como una multa administrativa de entre 601 y 30,000 euros. Aunque el tiempo ha pasado y la reina ha dejado atrás sus años más salvajes, esta revelación arrojó una nueva luz sobre su historia personal. Parece que Juan Carlos o Iñaki Urdangarin no son los únicos miembros de la familia real que han guardado secretos y sorpresas.