Si llega a saber que un día se convertiría en reina, Letizia nunca se hubiese comportado de esa forma. La hija de Paloma Rocasolano estudió para periodismo sin ninguna pretensión. Nunca pensó que sería la reina de España, aunque según Jim Russo, ella tenía claro que quería conocer a Felipe VI, y sabía que con el periodismo era una carrera con el que tarde o temprano podría coincidir con él. Y así sucedió. Es una mujer ambiciosa y toda la familia sabía que llegaría muy lejos. Sin embargo, durante sus primeros 30 años, la asturiana fue una joven más, y se comportó como tal, disfrutando de la vida.
Se han escrito muchas biografías no autorizadas de la reina con episodios de su pasado, una de ellas a manos de David Rocasolano. Nunca se imaginó que un familiar podría traicionarla por dinero. Se ha hablado de la situación económica de su familia, no tenían ni un euro, o también de sus veranos en Cataluña con su hermana Telma, donde hacía autostop y iba a playas nudistas. Por suerte en aquella época no era famosa y no existe ninguna fotografía de ella. En México también vivió muchas aventuras. Sus amigas más cercanas cuentan que a Letizia le gustaba mucho la fiesta y beber. Volvía a casa cuando ya era la hora de ir al trabajo, a veces ni dormía, y algunas tenían que ir a recogerla porque no se sostenía en pie. Aunque hay que reconocer que siempre estaba al 100% en el trabajo.
Letizia tenía una gran relación con sus abuelos. Paco y Kety, estos eran los padres de Paloma Rocasolano. Aún hay una fotografía del matrimonio junto a su hija en las playas de Benidorm a primera hora de la mañana para coger sitio en la playa, iban todos los veranos con la sombrilla, las sillas plegables, la radio y la nevera repleta de refrescos y bocadillos para pasarse el día.
Letizia no olvida los momentos con sus abuelos Paco y Kety
La asturiana recuerda muchos momentos bonitos vividos con ellos en Asturias, y con sus hermanas y primos. Hay algunas fotografías de cuando era un adolescente y se iba a la piscina con sus abuelos.
La reina está empeñada en hacer desaparecer de su vida aquella época de un plumazo. Sin embargo, habría momentos que no querría hacer desaparecer de su vida, como estas bonitas imágenes de una familia unida. Con algunos ya no tiene relación, y ortos, por edad, lamentablemente no están a su lado. Se acuerda de ellos todos los días de su vida.
En la fotografía Letizia utilizaba bañador, como sus hermanas, y permanecía al lado de su abuelo Paco. Con ella también está David Rocasolano, el traidor de la familia, nadie le habla desde que publicó ese libro.