Letizia tiene miedo y todavía más miedo en Catalunya. La reina de España vive su peor momento de dos reinados, el de Juan Carlos como princesa y el de Felipe como reina. En 20 años de matrimonio con Felipe, Letizia ha sufrido todo tipo de campañas y críticas por errores propios o ajenos: por vigoréxica, por operada, por atea, por roja, por indomable, por humillar a la emérita Sofía...Pero la más cruda es la de ahora, la que la acusa de ser una "mala madre de familia" en el sentido clásico, monárquico y derechoso. No se ha adaptado al papel de la esposa devota como Sofía que aguanta lo que le caiga. Letizia hubo un momento que dijo basta a Felipe, que se desenamoró, que se sintió excluida, alejada de su marido y con las niñas ya más crecidas, 5 años tenía Leonor, se lanzó a una aventura extramatrimonial con Jaime del Burgo.
No la dejen explicarse pero es fácil deducir que Letizia, si pudiera, diría que en aquella época, años 2010-11 la relación con su marido pasó por el peor momento y huyó como pudo. Del Burgo le daba la seguridad que Felipe no le proporcionaba. Tanto es así que la falsa boda de Del Burgo con Telma hace sospechar si la relación de Jaime con Letizia se alargó más allá de 2011 y que Telma fuera una tapadera de Letizia. Ahora toda España sabe que la reina fue infiel y ella le tiene miedo a salir a la calle. Por eso esta semana de enero ha prohibido a Zarzuela que le coloque ningún acto oficial más que uno. Pero menudo uno: en territorio hostil, Catalunya, la zona de España en la que Letizia más se expone a que le griten "adúltera".
Solución: ir directa del coche oficial al acto sin detenerse a saludar vecinos. Visto y no visto. Ha llegado tarde y ha dado una excusa de mal pagador: que había niebla. Los mossos se le cuadran, como una autoridad oficial de España y visita dos exposiciones a toda prisa. Ni una sola foto con catalanes de la calle. Letizia tiene mucho miedo a una escena que puede llegar en cualquier momento, y más probablemente si visita Catalunya. Esta vez también ha recurrido al rojo España de total look que acostumbra a vestir cuando visita territorio catalán. Una costumbre que empieza a parecer una provocación. Visita tras visita viste de rojo en Catalunya, reivindicando el color que más se asocia a la españolidad, por la Selección de fútbol, por la bandera o por tradición. Letizia detesta el independentismo. Según Pilar Urbano, fue Letizia quien obligó a Felipe VI a poner literalmente "más cojones" contra Catalunya en su discurso más famoso en 10 años de reinado, el del 3 de octubre de 2017, dos días después del referéndum.
Gesto muy inusual, Letizia cogiéndose de las manos con el artista plástico Juan Zamora que recibió el Premio Princesa de Girona. Manos unidas en señal de cordialidad extrema. Letizia fuera de protocolo y tocándose de manera inusual, algunos monárquicos dirán que inapropiada. Letizia detesta las multitudes, las teme, sobretodo a las catalanas. Pero dentro del acto oficial con todo bajo control no rehúye el calor humano. Será que en casa no lo recibe.