Las tensiones en la familia real española se han intensificado en los últimos meses, y gran parte de esa presión recae sobre la reina Letizia. A medida que las relaciones entre Felipe VI y Letizia parecen haberse enfriado, con rumores de separación y distanciamiento cada vez más persistentes, la reina enfrenta ahora un nuevo desafío: recuperar la normalidad con sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.

Desde hace tiempo, cronistas como Jaime Peñafiel y Pilar Eyre aseguran que el matrimonio entre Felipe y Letizia es, en realidad, una mera formalidad, un compromiso que ya no tiene sustancia emocional. “La pareja ya no existe”, ha señalado Peñafiel. Estas afirmaciones se vieron reforzadas tras las explosivas revelaciones de Jaime del Burgo sobre presuntas infidelidades de la reina, tanto antes de su matrimonio con Felipe como después del nacimiento de sus hijas. Estas informaciones han sacudido a la monarquía y han dejado a Letizia en una posición incómoda, aislada dentro de la familia real y enfrentando crecientes dificultades en su vida personal.

Letizia y Felipe

La reina Letizia quiere recuperar la normalidad con Leonor y Sofía

En medio de esta tormenta,  Letizia parece haber encontrado consuelo en la compañía de un nuevo amigo millonario, con quien ha compartido escapadas a Valencia y otros lugares lejos de los focos mediáticos, tal y como ha señalado la experta Laura Rodríguez. Sin embargo, su deseo de normalizar su vida y encontrar una estabilidad emocional al margen de Felipe se ha topado con la resistencia de sus propias hijas, especialmente Leonor.

La relación entre Leonor y Letizia ha mostrado señales de distanciamiento en los últimos meses, coincidiendo no solo con la mayoría de edad de la princesa, sino también con las recientes revelaciones sobre la vida privada de su madre. Aunque la veracidad de estas acusaciones sigue siendo debatida, su impacto en la dinámica familiar es innegable. Leonor, que se está consolidando como una figura pública de gran relevancia y proyección, parece cada vez más alejada de su madre. Prefiere pasar tiempo con sus compañeros de la aspirantes a militares y los amigos que hizo en Gales, y disfrutar de la vida lejos de los conflictos que sacuden el Palacio de la Zarzuela.

Letizia en el día grande de Leonor

Leonor y Sofía prefieren mantenerse al margen

Esta tendencia a distanciarse se ha visto reflejada en su negativa a relacionarse con el nuevo círculo de amistades de su madre. Leonor quiere evitar verse involucrada en la complicada situación que viven sus padres y opta por mantenerse al margen. Es por eso que Leonor no quiere relacionarse con los círculos de su madre, y tampoco con sus amigos millonarios. Una posición que respalda Casa Real, donde consideran que Letizia está generando mala imagen y que lo importante es potenciar la de Felipe VI y la de la futura reina, Leonor.

La misma actitud está tomando la infanta Sofía. Poder estudiar en Gales es un respiro para ella, que ha tenido que aguanta más tiempo que Leonor el ambiente tenso que se vive en palacio. Sofía también está marcando distancia y se muestra reacia a aceptar a los nuevos amigos de su madre. Como Leonor, no se quiere ver en el centro de la guerra que mantienen Felipe y Letizia. Prefiere protegerse de las disputas que se están gestando en el seno de la familia real.