Cuando Letizia Ortiz se unió a la familia real española, sus orígenes plebeyos y su pasado divorciado provocaron tanto expectación como desaprobación. La monarquía española, arraigada en tradiciones centenarias, recibió con reservas a esta periodista convertida en princesa. Aunque lo cierto es que Letizia pronto se ganó la aprobación, demostrando que estaba capacitada para responder a los protocolos reales. De hecho, ha sido bautizada como reina influencer por su buen gusto a la hora de vestir.

Sin embargo, detrás de las elegantes fachadas y los protocolos reales, circulaban historias que contrastaban con la imagen pública de la reina consorte. Se rumoreaba que Letizia tenía un pasado en México, donde su gusto por el vino y el tequila, su bebida favorita, la había llevado a frecuentar fiestas que, según algunas fuentes, a menudo terminaban en excesos. La sombra de episodios de embriaguez y comas etílicos la acompañaba, alimentando chismes y preocupaciones entre los círculos más cercanos a la corona.

Letizia de joven

Deslizan un presunto ingreso hospitalario de la reina Letizia tras pasarse con el alcohol

A pesar de los esfuerzos por dejar atrás ese estilo de vida, los rumores persistían. Testimonios de México y medios sensacionalistas como SalsaRosa han mencionado un ingreso hospitalario tras pasarse con la bebida. Incluso se habla de fotografías comprometedoras que, según se decía, la casa real se apresuró a eliminar.

Asimismo, cabe decir que la llegada al trono de Letizia no silenció los murmullos sobre su relación con el alcohol.  Joaquín Abad, en su libro "Letizia, una biografía no autorizada", detalla un incidente que arroja sombra sobre la conducta de la reina. "Ya de reina un madrileño que conducía por la A-6 a La Coruña observó un Mercedes negro y con los cristales traseros tintados haciendo eses. El conductor no se encontraba en condiciones. Al tratar de adelantarlo le impidió el paso otro vehículo con antenas, era un coche escolta. Ese y otro vehículo oficial impedían que al adelantar al Mercedes hubiera un accidente. El individuo, cansado de ver al Mercedes haciendo eses, acabó adelantándolo. Al pasar junto al vehículo descubrió que era conducido por Letizia", escribe el autor.

Letizia saluda EP

A día de hoy, Letizia asegura ser abstemia. Ha optado por una vida sin alcohol en público, distanciándose de los excesos que alguna vez la definieron. Su transformación es testimonio de su determinación y del apoyo que recibió para superar sus luchas personales. Algunas fuentes apuntan que Jaime del Burgo tuvo mucho que ver con el alejamiento de Letizia de la bebida.