Letizia y Felipe se enfrentan a uno de sus peores momentos. Por culpa de Jaime del Burgo han recordado uno de sus peores episodios. Los reyes han vuelto a 2013, el año en el que sufrieron su gran crisis. El abogado ha destapado que ni las fechorías de Juan Carlos ni el caso Nóos que metió a la cárcel a Iñaki Urdangarin fueron los culpables de las frecuentes discusiones en Zarzuela, más bien se trataba de una supuesta infidelidad. Y para todos aquellos que no se creen la historia del ex de Telma Ortiz, Jaime del Burgo asegura que tiene pruebas gráficas, como vídeos, fotografías y mensajes que confirmarían sus palabras.
Jaime del Burgo ha desestabilizado al matrimonio y ha dañado la imagen de Felipe y Letizia. Parece que alguien ha iniciado una campaña de desprestigio de los monarcas, especialmente de la madre de Leonor y Sofía que en los últimos años ha conseguido ensombrecer al rey de España. El ex de Telma Ortiz ha utilizado a la reina para acabar con la monarquía española, y es que esa es su verdadera intención. Se declara monárquico pero no borbónico. Quiere librarse de esa dinastía que lleva en el trono 300 años y para él ha empobrecido a España.
Los reyes a Barcelona el 14 de febrero para limpiar su imagen
Letizia pensaba que esto pasaría como muchas otras habladurías. Sin embargo, las especulaciones no han cesado. Casa Real no ha querido confirmar ni desmentir estas declaraciones, prefieren optar por el silencio. No obstante, ha iniciado una campaña de blanqueamiento desde Zarzuela.
Como sabían que todos hablarían de sus movimientos en San Valentín, Casa Real ha decidido unirles el 14 de febrero. Este miércoles ambos se encuentran en Barcelona para varios compromisos institucionales. En el primero solo intervendrá Felipe mientras que en el segundo estarán presentes los dos.
Casa Real ha pedido que se muestren muy cercanos en este día tan especial para los enamorados. Se les pide que zanjen de una vez por todas los rumores de una ruptura con un apasionado y romántico beso ante las cámaras. Sin embargo, hasta ahora no han hecho ningún movimiento. Se muestran totalmente correctos y distantes. Solo actúan como reyes, y no como un matrimonio.