Letizia nunca pensó que se convertiría en reina. Por ello vivió su juventud como cualquier otra persona de su edad. Por ello Juan Carlos, sabiendo lo que podía suceder, le pidió a Felipe que no se casase con una plebeya, lo mejor para la corona era emparentarse con una mujer de la realeza, como él. Como con el resto de parejas, cuando el entonces príncipe les presentó a la presentadora de informativos de TVE, el emérito pidió al CNI que la investigasen y le enviasen un informe detallado. Tenía muchos episodios oscuros que tapar.
Juan Carlos se reunió con Felipe antes de que este anunciase el compromiso con Letizia y cuando su relación ya era un secreto a voces. Le destapó uno de los mayores secretos de la reina. Había abortado en dos ocasiones. Para sorpresa del emérito, su hijo ya era conocedor de ello. La madre de Leonor y Sofía le puso en situación para que actuase en consecuencia y borrase cualquier prueba si lo creía oportuno. Un gesto de sinceridad que en aquel momento el príncipe le agradeció.
Letizia abortó en México
Se habla de un aborto en Madrid, como detalla David Rocasolano en su libro sobre Letizia, él mismo se encargó de borrar las pruebas. Y otro en México, el que levantó más polvareda. Isidre Cunill, en su libro ‘Letizia Ortiz: una republicana en la Corte de Juan Carlos I’, reveló que Letizia tuvo otro aborto en México, a principios de 1996, cuando era estudiante. Este procedimiento se llevó a cabo en el hospital Médica Sur del Distrito Federal.
Tal y como informa la periodista Laura Rodríguez, Letizia tuvo una relación extramatrimonial con el jefe del periódico Siglo XXI, que estaba casado. Fue la mujer de este quien se enteró de todo y como venganza denunció a Letizia en la policía de México. El aborto allí no es legal, por este motivo aprovechó para ponerle la zancadilla.