A diferencia de Juan Carlos I, Felipe VI nunca ha sido tildado como “depredador sexual”, aunque, según algunas fuentes, durante su juventud también tuvo una serie de relaciones sentimentales con varias mujeres. En su etapa como príncipe, Felipe se destacaba por su atractivo físico: era un joven alto, de cabellos rubios, ojos azules, y con el añadido de su estatus como miembro de la realeza, lo cual lo hacía irresistible para muchas. Algunas mujeres se sentían atraídas por su evidente atractivo, mientras que otras veían en él la posibilidad de convertirse en una figura poderosa al ser pareja del futuro rey de España. Entre estas últimas se podría contar a Letizia Ortiz, quien, según algunas versiones, habría decidido estudiar periodismo con el propósito de acercarse al príncipe y, eventualmente, convertirse en la reina de España.
Sin embargo, Felipe VI siempre fue una persona reservada, y según se cuenta, le costaba mucho acercarse a las mujeres. Incluso su padre, el rey Juan Carlos I, pensaba que su hijo podría quedarse soltero indefinidamente. Para facilitarle conocer mujeres, el entonces príncipe habría recurrido a la agencia de modelos de Javier Hidalgo. De esta manera, conoció a algunas de sus primeras parejas, como la modelo noruega Eva Sannum. Posteriormente, Felipe expresó su interés por conocer "chicas guapas de la tele", y fue entonces cuando le presentaron a Letizia Ortiz, una joven periodista que trabajaba en televisión. Estos detalles sobre la vida personal de Felipe han sido expuestos por el autor Isidre Cunill en su libro, aunque Letizia no habría sido la única presentadora que pasó por la vida del ahora rey. También se especula que Felipe tuvo un vínculo con la conocida presentadora Anne Igartiburu, quien, curiosamente, también habría tenido contacto con su padre, Juan Carlos I.
Letizia ponía en la lista negra a todas las mujeres que habían tenido relación con Felipe VI
En el tiempo en que comenzó a salir con Letizia, Felipe continuaba viendo a otras mujeres, muchas de ellas figuras públicas de la televisión española. En particular, se menciona una mujer cuyas iniciales son R.S.V., tal y como lo relata el periodista Javier Bleda en su libro "Viuda súbita, reflexiones sobre un asesinato". A pesar de sus compromisos institucionales como príncipe, Felipe VI participaba en numerosos eventos sociales organizados por importantes medios de comunicación, donde conoció a varias presentadoras. En una de esas celebraciones, un aniversario de Mediaset, conoció a una mujer con la que, según las fuentes, tuvo una buena relación, lo que llegó a despertar los celos de Letizia. Este vínculo fue más allá de una simple amistad, pero actualmente, según el periodista, no existiría contacto entre ellos. Este pasado ha hecho que la mujer en cuestión nunca sea invitada a eventos de la Casa Real, especialmente si Letizia está presente. Este hecho refuerza la idea de que, debido a su pasado, su relación con la realeza quedó marcada negativamente, quedando fuera del círculo de relaciones públicas oficiales.