Letizia intenta proyectar una imagen perfecta. Es calculadora y controladora, demasiado ambiciosa para cometer el más mínimo error. La corona estuvo a punto de desaparecer en España con las polémicas de Juan Carlos I o el caso Nóos, pero ella consiguió apartar a los Borbón y empezar una nueva era. El emérito no quería a la periodista en la familia porque era plebeya y sabía que eso traería muchos problemas. Como a todas las parejas de Felipe VI, el exmonarca la investigó con la ayuda del CNI. Hasta que conoció al príncipe, Letizia se comportó como una joven más y lógicamente hay episodios oscuros que han visto la luz a lo largo de todos estos años.

David Rocasolano es el primero que intentó dañar la imagen de la madre de Leonor y Sofía con información muy delicada como dos supuestos abortos que padeció, uno en México y otro en Madrid. Y es que en Latinoamérica es donde más se soltó la melena. Separa de su profesor de instituto, su primera relación. Decidieron darse un tiempo. Allí se dijo que empezó una relación con el jefe del periódico Siglo XXI.
Las imágenes de Letizia bebiendo que pidió a Felipe VI que borrase
Según lo informado por 'Cazabunkers', y basándose en los relatos de algunas amigas de aquella época, la madre de Leonor y Sofía solía ser muy aficionada a la vida nocturna. Salía prácticamente todas las noches, incluso cuando tenía que levantarse temprano para ir a trabajar. Le encantaba bailar hasta altas horas y consumía bastante alcohol, siendo el tequila su bebida preferida. Estas amigas contaron al medio que en más de una ocasión ella terminaba tan mal que tuvieron que ir a buscarla para llevarla a casa. Aun así, les llamaba la atención que siempre lograba llegar puntual al trabajo al día siguiente, y además, en perfecto estado, como si la noche anterior no hubiese sucedido nada.
Según la información de Maica Vasco, en México frecuentaba muchas tabernas y le encantaba beber tequilas. En estos locales conocía a apuestos hombres con los que mantenía relaciones esporádicas. La periodista asegura que la monarca muestra una imagen que no es real. Es impostada. Ella quiere aparentar ser la reina perfecta, pero no es verdad. Fuma y bebe, por mucho que apueste por una vida saludable.
Joaquin Abad ya recordó uno de sus problemas por beber alcohol. Se empeñó en conducir el Mercedes por la A-6 dirección A Coruña y sus escoltas tuvieron que evitar el que podría haber sido un trágico accidente.
Letizia fue sincera con Felipe VI para que se borrasen todo tipo de fotografías y vídeos para que nadie pudiese confirmar estas noticias con pruebas, que solo parezcan invenciones.
