‘La época dorada del fitness’, es así como algunos periodistas denominan este período que ha estado marcado por millones de personas que tienen tendencias al autocuidado. Ejercitarse, consumir alimentos saludables (ecológicos en su mayoría) y hacer actividades al aire libre. Otro aspecto importante es la renuncia al alcohol, que parece haberse vuelto una tendencia en sí. Tal y como respaldan las investigaciones, el nivel de tolerancia adecuado para el alcohol es cero. Si alguien ha tenido que experimentar un gran susto con el alcohol, por cierto, es Letizia. Se habla de un ingreso hospitalario en México por sobrepasar los límites.
Pese a la imagen que la institución real ha querido mantener en las últimas décadas, el colectivo público sabe a ciencia cierta que los miembros de la monarquía tienen inclinación por descartar hechos inaceptables. Como si no hubiesen pasado. Así es como, entre protocolos reales y una apariencia súper prolija, Letizia resurgió como una reina consorte digna y muy respetable. Sin embargo, los rumores de un pasado en México siguen acosando y planteando dudas sobre su persona.
Se dice, pues, que tenía predilección por la fiesta y las bebidas alcohólicas. La larga sombra de estos episodios inaceptables no podría ser peor, ya que hasta se tiene constancia del ingreso a un centro sanitario por embriaguez desmedida. Te contamos más.
Lo que oculta el pasado de Letizia, sufrió un coma etílico
Sí, puede haber algunos datos sacados de contexto y exagerados sobre la vida de Letizia. No obstante, no se puede negar que era una joven aficionada a la bebida. Sobre todo al tequila, que se volvió su bebida favorita cuando estaba en México. En medio de fiestas y reuniones desenfrenadas, estos episodios de embriaguez empezaron a ser cada vez más preocupantes. Son varios los testimonios de personas que estuvieron a su alrededor en aquel tiempo los que aseguran que llegó a sufrir un coma etílico.
Medios como SalsaRosa recuperan las informaciones sobre su paso hospitalario, un ingreso forzoso que hicieron sus amigos y compañeros al darse cuenta de sus síntomas. Y es que tener un coma por exceso de alcohol no es cualquier cosa, sucede cuando se pierde la consciencia. El hígado no es capaz de procesar demasiado alcohol, consecuentemente, se vuelve grave con la intoxicación del cerebro y otros órganos. En realidad, el hígado es capaz de metabolizar una bebida por hora (aproximadamente). Hay otros factores que pueden influir en la aceptación del licor en el cuerpo.
Esta experiencia pudo haber sido determinante para cualquiera. Tocar fondo y decidir un cambio de vida radical. Y aunque la reina no ha vuelto a tener un problema de esta magnitud, Joaquín Abad hacía referencia a su alcoholismo en su libro Letizia, una biografía no autorizada. Donde un conductor madrileño la vio conducir sin ningún cuidado, se presumía ebria.
Letizia, después de todo, se volvió ‘abstemia’. Lleva una vida fitness, es firme en su alimentación y trata de generar conciencia en los demás. Eso sí, todavía hay numerosas especulaciones sin confirmar en el aire.