La reina Sofía y Letizia nunca han tenido buena relación. Igual que Juan Carlos, a la emérita la asturiana no le pareció una buena opción para Felipe, hubiese preferido una mujer de la realeza. No obstante, a Sofía la venció el amor de madre, y aceptó esa relación, incluso se comprometió a formar a la reina en protocolo. Pero la madre de Leonor y Sofía demostró que reina se hace, no se nace. Cuando tuvo ocasión, la monarca echó a todos los Borbón de casa, a todos menos a una, la reina Sofía, con ella no pudo hacer nada por su papel de víctima. Se quedó como emérita. Pero Letizia nunca la respetó.
Letizia ha apartado a la reina Sofía de muchos actos, especialmente a los relacionados con sus dos hijas. Siempre le dice que no. Por suerte puede ir a los Premios Princesa de Asturias porque públicamente reaparece Paloma Rocasolano y sería un escándalo dejar a una abuela y a la otra no. Una humillación para la reina Sofía, para la propia Letizia, pero también para Felipe VI.
Juan Carlos y Sofía, apartados del X aniversario de la coronación de Felipe VI
Mañana es un día muy importante para la corona española y la reina Sofía ha recibido un nuevo gesto por parte de Letizia. Se cumplen 10 años de la coronación de Felipe VI como rey de España, y se quiere que sea él solo el protagonista. Además de Leonor y Sofía que estarán presentes durante todo el día. La reina Sofía ha pedido estar presente en este acto, pero como sucedió en la jura de la Constitución de Leonor, se le ha denegado.
El día dará inicio de buena mañana con la asistencia al relevo solemne de la Guardia Real en el Palacio Real de Madrid. Posteriormente, se realizará el acto de imposición de condecoraciones de la Orden del Mérito Civil para concluir con un almuerzo ofrecido por sus Majestades los Reyes con ocasión del X aniversario de la proclamación de su Majestad el Rey.
Se espera que a estos actos acudan los condecorados y sus acompañantes, pero también asistirán el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, los poderes del Estado y quienes han presidido órganos constitucionales desde 2014. Una de las particularidades de la comida, en la que no habrá presidentes autonómicos, es que los ciudadanos anónimos estarán intercalados entre las autoridades para poner en valor su aportación como sociedad civil. Una vez más, Casa Real ha vetado a toda la familia.