Felipe y Letizia no han celebrado públicamente su veinte aniversario de bodas. Se esperaba el pasado miércoles que publicasen alguna fotografía juntos, desvelasen imágenes de su álbum familiar, o se compartiesen algún plan por Madrid y las cámaras les fotografiasen juntos. Era sospechosos porque habían vaciado su agenda institucional ese día, tal vez para evitar preguntas tras los rumores que sobrevuelan su matrimonio. Periodistas como Jaime Peñafiel o Pilar Eyre siempre han sostenido que el matrimonio estaría roto, mientras que otras comunicadoras como Maica Vasco se atreven a afirmar que el matrimonio es una farsa desde sus inicios.
Sea como sea, en los últimos meses, tras la campaña de desprestigio a la reina, Felipe y Letizia han compartido poco tiempo juntos. Y es que desde que Leonor y Sofía no están en Zarzuela han preferido hacer sus vidas por separado. No comparten ni una sola afición. Solo coinciden juntos en actos institucionales en los que denotan una cierta ausencia de complicidad.
Casa Real ha tenido varias oportunidades para desmentir los rumores sobre una posible infidelidad a Letizia a Felipe, son palabras mayores, pero no han querido. Han continuado en sus trece. Máximo silencio. Una vez al mes, la corona obliga a los padres de Leonor y Sofía a compartir algún plan juntos para silenciar los rumores. Sin embargo, la mayoría de fines de semana pasan el tiempo por separado con sus respectivos amigos.
El pasado fin de semana viajaban a Oviedo para un compromiso institucional, el desfile de las Fuerzas Armadas. Sin embargo, Felipe se instaló en el hotel el pasado viernes, mientras que Letizia llegó el mismo sábado y ambos se marcharon a Madrid una vez terminado el acto.
Felipe y Letizia, planes por separado con sus amigos
Se ha visto en numerosas ocasiones a Felipe con sus amigos de la infancia, como los hermanos Fuster. Todos los fines de semana se escapa a tomar algo con ellos a su casa en Pozuelo de Alarcón. Letizia también tiene reunión de chicas, normalmente los jueves por la tarde, noche, hasta entrada la madrugada. Se reúne siempre en casa de alguna amiga del grupo, en exclusivas urbanizaciones. Salen a tomar algo y a cenar. A veces piden comida a domicilio y otras veces se van al restaurante. Intenta frecuentar poco el centro de Madrid, y cuando lo hace siempre aparece con una peluca y gafas de sol.