Letizia ha sido descrita como una mujer controladora, fría y calculadora, siempre buscando tener el control absoluto de las situaciones. Sin embargo, en los últimos meses, parece que ha perdido parte de ese control. Se ha desatado una campaña de desprestigio dirigida a dañar su imagen y debilitar su influencia. En este contexto, Felipe VI ha pasado a un segundo plano, lo que evidencia que la reina ha perdido parte de su poder. Pero lo que Letizia probablemente no esperaba era el precio que tendría que pagar por esta situación.

El abogado Jaime del Burgo ha revelado una información altamente delicada que la Casa Real había mantenido oculta hasta la fecha. Según su testimonio, la reina Letizia mantuvo una relación extramatrimonial con él durante varios años, lo que ha generado un escándalo de grandes proporciones dentro de la monarquía. Esta revelación ha provocado que se vuelva a hablar sobre el pasado de Letizia, un pasado que ha sido objeto de innumerables biografías no autorizadas y rumores que cuestionan su carácter y comportamiento.

Felipe y Letizia, GTRES

A lo largo de las últimas dos décadas, han circulado diversas versiones sobre la vida privada de Letizia. Algunos expertos en la monarquía han sacado a la luz aspectos oscuros de su pasado, incluyendo su supuesta adicción al alcohol y al tabaco, además de hablar de embarazos no deseados, abortos e infidelidades. Todo esto ha contribuido a construir una imagen polémica de la reina. En una de las biografías no autorizadas, escrita por el periodista Joaquín Abad, se describen episodios que no dejan a Letizia en una buena posición. Uno de los más alarmantes es cuando, según la obra, fue vista conduciendo bajo los efectos del alcohol mientras era escoltada por vehículos oficiales.

Letizia bebía mucho cuando salía de fiesta 

Algunas de sus antiguas amigas han afirmado que en su juventud Letizia disfrutaba de la vida nocturna, saliendo de fiesta hasta altas horas de la madrugada y bebiendo en exceso, aunque, curiosamente, siempre cumplía con sus responsabilidades al día siguiente. Sin embargo, lo que más preocupa de estas revelaciones no es solo la supuesta afición de la reina por el alcohol, sino también su temeraria conducta al volante. En uno de estos episodios, un conductor madrileño relató haber visto un Mercedes negro zigzagueando por la carretera A-6 que conduce a La Coruña. Al intentar adelantarlo, otro vehículo escolta impidió el paso para evitar un accidente. Cuando finalmente logró adelantar el Mercedes, el conductor descubrió que era Letizia quien iba al volante, aparentemente en un estado poco apto para conducir.

Este tipo de comportamientos imprudentes, que ponen en riesgo tanto la vida de la reina como la de otras personas inocentes, ha generado preocupación en algunos sectores. Aunque los escoltas de la reina intentan protegerla, según ciertas fuentes, se sienten incómodos con su actitud hacia ellos. Al parecer, Letizia ha intentado seducir a varios de sus escoltas, lo que ha generado incomodidad entre algunos de los miembros de su equipo de seguridad. Se comenta que, por esta razón, algunos escoltas varones prefieren evitar la sala de ejercicios del palacio cuando Letizia está presente, ya que consideran que su presencia les pone nerviosos.

Estos relatos, ciertos o no, han contribuido a la creación de una imagen controvertida y compleja de la reina Letizia, cuyos actos y decisiones son constantemente objeto de escrutinio y debate público.

Felipe y Letizia en el coche