Los que hace ya muchos años que siguen atentamente todas y cada una de las noticias de la casa real en nuestro país son muy conscientes de que uno de los principales motivos de preocupación de la Reina Letizia ha sido y sigue siendo el cuidado de sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.

En este sentido, no es que sea precisamente ningún secreto que incluso han sido muchas las veces que la mujer de Felipe VI ha ido demasiado lejos en lo que se refiere al control de sus hijas en lo que se refiere a amistades, alimentación  o tiempo libre, tal y como apuntaron hace ya un tiempo en algunas ocasiones algunos compañeros de colegio tanto de Leonor como de Sofía.

Eso sí, por mucho que seguramente a Letizia no le guste, sus hijas se han hecho mayores, y ya no son precisamente unas niñas a las que pueda controlar. Es más, como no podía ser de otra forma teniendo en cuenta que la princesa Leonor ya ha cumplido la mayoría de edad, ya han empezado aparecer en los medios de comunicación algunas noticias hablando de posibles romances.

La reina Letizia quiere controlar muy bien a los posibles novios de su hija

Cabe tener en cuenta en este sentido que, más allá del carácter controlador de la Reina Letizia, desde la institución tienen muy claro que si algún día se hace oficial alguna relación de la princesa Leonor, su novio debe cumplir una serie de requisitos, entre otras cosas porque podría acabar siendo el futuro príncipe.

Letizia en el día grande de Leonor
Letizia en el día grande de Leonor

No ha sido otra que Pilar Eyre la que ha apuntado algunos de los detalles que se tienen en cuenta en Zarzuela. En este sentido: “El príncipe consorte va a ser uno de los hombres más fotografiados del mundo y solo un semblante agradable y una sonrisa cálida pueden evitar que acabemos hasta las narices de su rostro”.

Pero ojo porque uno de los aspectos que más se tienen en cuenta de cara al futuro en este sentido es el pasado que podría tener el posible novio de Leonor. “Ni novias problemáticas, ni estafas, ni gamberradas, ni drogas, ni juergas. Ninguna detención, ni ningún amigote que vaya por los platós contando sus intimidades. Ningún acontecimiento que lo haga susceptible a ser chantajeado, como ha ocurrido en el pasado”, apunta la periodista.

De momento no se conoce ninguna relación seria y oficial de la futura reina, pero parece evidente que el que acabe enamorando a la hija de Felipe y Letizia va a ser examinado con lupa.