En las últimas semanas se ha hablado mucho de dos graduaciones en el entorno de la familia real. Junio ha sido un mes de celebraciones en la aristocracia española. Pero hay una tercera de la que apenas se han publicado informaciones.
La graduación de la que más se ha hablado es la de Irene Urdangarin. La hija de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina celebró una fiesta doble con motivo de su 18 cumpleaños y de haber terminado segundo de Bachillerato. Una fiesta que provocó ríos de tinta, dada la concentración que se produjo. Entre otros encuentros comprometidos, Iñaki y Cristina se vieron las caras después de mucho tiempo y en medio de las negociaciones relacionadas con su divorcio. La fiesta tuvo lugar en Suiza el pasado 16 de junio.
Unos días antes había tenido lugar otra graduación: la de la princesa Leonor. La futura reina también completó segundo de Bachillerato en el UWC Atlantic College. La fiesta se celebró en el internado británico. Y a ella acudieron sus padres, los reyes Felipe y Letizia, y su hermana, la infanta Sofía. Ahora Leonor se prepara para ingresar en la Academia Militar de Zaragoza el próximo mes de agosto. Pasará tres años recibiendo formación en los ejércitos de tierra, mar y aire.
La infanta Leonor también se ha graduado
Pero como decíamos, estas no han sido las únicas graduaciones que se han celebrado en las últimas semanas. La infanta Sofía también ha tenido su momento de gloria. Justo un día después de la fiesta de Irene, el 17 de junio, se celebró la graduación de la pequeña de las hijas de Felipe y Letizia. La joven acabó de cursar la ESO en el Colegio Santa María de los Rosales de Aravaca y lo celebró junto a sus compañeros, tal y como publicó OK Diario. Ahora Sofía seguirá los pasos de su hermana mayor y cursará Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales.
Volviendo a la fiesta del 17 de junio, esta tuvo lugar en un local de Majadahonda, en las afueras de Madrid. La hora de inicio fueron las 23 horas y finalizó de madrugada, sobre las 3 horas del domingo.
Ni una gota de alcohol
Una fiesta en la que hubo música y los invitados se pusieron sus mejores galas. No obstante, no hubo comida y tampoco alcohol. Sí es cierto que los presentes no eran mayores de edad y no pueden beber, pero también lo es que Letizia, muy cuidadosa con lo que consumen sus hijas, se encargó personalmente de que no hubiera ni una gota de ninguna bebida animosa. Del mismo modo que la reina no quiere que sus hijas consuman comida poco saludable como fritos o azucarados, aunque la ocasión lo merezca, lo mismo ocurre con productos perjudiciales como las bebidas alcohólicas.