Es cierto que la reina Letizia ha perdido influencia en la corona desde las revelaciones de Jaime del Burgo acerca de posibles infidelidades por parte de Felipe VI en distintas etapas de su relación. Sin embargo, los últimos escándalos relacionados con el rey emérito Juan Carlos I como la creación de una fundación en Abu Dabi junto a las infantas Elena y Cristina para canalizar su herencia hacia ellas y evitar el fisco español, o las fotos publicadas por la revista privé en las que el ex monarca aparece con Bárbara Rey, la consorte ha recuperado parte de su estatus. Letizia vuelve a ocupar parte del primer plano, tal y como se ha visto en las visitas de los reyes a las zonas afectadas por la DANA mortal de la Comunidad Valenciana.

En dichas visitas, se ha visto a una Letizia dolida por la situación y empatizando con los ciudadanos, proyectando una imagen accesible. Sin embargo, fuentes afirman que la consorte aún enfrenta dificultades para adaptarse en ciertos contextos.

Felipe y Letizia visitan Valencia
Felipe y Letizia visitan Valencia

La reina Letizia no lleva bien los actos con menores

Por ejemplo, uno de los puntos más críticos es la evidente incomodidad de Letizia en actividades con menores. A pesar de ser madre de dos hijas, nunca ha ocultado su preferencia por eventos más formales y menos caóticos. Fuentes cercanas aseguran que situaciones como las inauguraciones escolares o las entregas de premios infantiles la ponen a prueba, ya que estos compromisos no encajan con su carácter controlado y perfeccionista.

En este sentido, según reveló la periodista Laura Rodríguez, Letizia fue "impertinente y demasiado creída" en un evento con niños como protagonistas. La monarca dejó una impresión negativa en los padres presentes, quienes no dudaron en calificar su actitud como grosera y altiva. La esposa del rey Felipe VI dejó al descubierto una faceta muy diferente a la que se busca mostrar ante las cámaras.

Tampoco hay que olvidar aquella ocasión en la que fue al cine con Felipe VI, en el que Letizia no quiso firmar un autógrafo a un niño. “No estoy trabajando”, le habría dicho la consorte.

Felipe Letizia niños EFE
Felipe Letizia niños EFE

Letizia no consigue conectar con las generaciones más jóvenes

Estos incidentes ponen de relieve un desafío clave: conectar con todas las generaciones, especialmente los más jóvenes. En una monarquía que busca modernizarse, la capacidad de empatizar con niños y adolescentes es crucial para asegurar la relevancia de la institución en el futuro. No obstante, las actitudes percibidas como altivas dificultan este objetivo y alimentan las críticas hacia su figura.

Este comportamiento contrasta con los esfuerzos de la Casa Real por fortalecer la conexión con los ciudadanos y recuperar la confianza perdida tras los escándalos del rey emérito Juan Carlos I. Letizia, quien ha retomado un papel más activo tras las recientes controversias familiares, intenta reconciliar la institución con el pueblo español. Su falta de empatía en contextos con niños podría convertirse en un obstáculo para esa misión.