Letizia está sentenciada. Este miércoles 9 de octubre pasará a la pequeña historia de la prensa rosa como el que marca el inicio del final de la reina. La sentencia la ha dictado el único medio que puede hacerlo, el BOE de Zarzuela: la revista Hola. Ya hace meses que este semanario ultra monárquico sufre una crisis existencial. Su razón de ser es la Corona. Todas en general pero la española en particular. Y la gran figura rosa de la Familia Real es Letizia. Pero a principios de diciembre su antiguo amante Jaime del Burgo cuelga una foto a twitter de Letizia en un lavabo con una pashmina dando a entender que habían sido amantes. Aquella foto, que vieron 26 millones de personas según twitter, provocó un atronador silencio en toda la prensa y en particular la prensa rosa.
La revista Hola vetó a Letizia, no ha vuelto a protagonizar ni una sola foto de portada en solitario a pesar de todos los actos oficiales, viajes solidarios o funerales. Ahora, nueve meses después, Hola ha decidido que Letizia vuelve a portada pero lo hace de manera maquiavélica. No es una Letizia sonriente, maquillada, vestida con glamur en un acto oficial. Es una Letizia horripilante, una foto comprada a un paparazzi que ha seguido a la reina un sábado a ver dónde come, unas fotos robadas, de Letizia saliente de un restaurante colombiano de Chamberí, sin peinar, ni maquillar y mal vestida. Con todas las raíces blancas de los mechones del pelo. Las fotos que muestran que Letizia ya no es del gusto de Hola. Hace unos años Hola habría comprado las fotos para quemarlas, para evitar que nadie las publicara. Hoy muestra una Letizia envejecida para justificar su ausencia de nueve meses: ya no está para fotos.
El rictus, los tejanos, el jersey, las raíces sin teñir. Todo es el antiglamur. Sería una foto más si cada semana Hola hubiera sido mostrado en portada una Letizia estupenda. Pero que la revista escoja precisamente esta imagen de la reina para su retorno en los honores de portada dice mucho de las intenciones de la foto: evidenciar que el foco de Casa Real y los ciudadanos ya no gira sobre Letizia sino que ilumina a Leonor, y en menor medida a la fotogénica Irene Urdangarin. Son las dos estrellas de la Casa y que Hola dedica portadas a menudo. A Letizia, 52 años recién hechos, ya solo le queda una ventanilla pequeña de la portada con una foto que hace un tiempo se habría desestimado por poco favorecedora y ahora se escoge por ejemplar: Letizia está más fuera que dentro.
Letizia comió en un restauarante, La Rochela, donde el menú cuesta 14 euros. Letizia low cost.