Letizia llegó a Marivent el pasado sábado 29 de julio a las dos del mediodía en compañía de Leonor y Sofía. Fueron escoltadas en todo momento hasta el palacio de Marivent, donde decidieron entrar por la puerta de atrás para que no llamar la atención de la prensa. Una forma discreta y privada. Justo unas horas más tarde, la reina Sofía desapareció por sorpresa de su residencia, algo que no había sucedido nunca. Justifican que esta escapada se debe a un compromiso institucional que ya estaba programado en su agenda desde hace meses, pero ha avivado todos los rumores de una mala relación entre las reinas.
Entre ellas la tensión siempre ha sido máxima, han tenido varias desencuentros a lo largo de estas últimas dos décadas, pero parece que Sofía se habría hartado de ese trato. La emérita tenía la ilusión de reunir a sus ocho nietos en Marivent como en los viejos tiempos. Sabe que debido a su edad es complicado pasar muchos más años en el palacio, aunque no tenga ningún problema de salud, y le gustaría quedarse con ese recuerdo. Se reunió con sus tres hijos y les comunicó la decisión. Las infantas Cristina y Elena aceptaron al momento, mientras que Felipe, como siempre, debía consultárselo a Letizia. Lógicamente, la reina se negó a que Leonor y Sofía viesen a sus primos y a sus tías.
Las fotografías para silenciar los rumores de una mala relación
El pasado martes la familia real por fin realizó el tradicional posado de verano junto a sus hijas. Felipe y Letizia deben promocionar todos los años el turismo en la isla y eligieron los idílicos jardines de Alfabia, en la Sierra de la Tramontana. Como todos los años la fotografía está pensada al milímetro. Una finca repleta de agua, fuentes y estanques con un espléndido jardín y un huerto. Según el rey, nunca han estado en este emplazamiento “tan maravilloso”, le sorprende no haber ido “antes”.
Justamente estas fotografías llegaban un día más tarde de los rumores de mala relación entre Sofía y Letizia tras la marcha inesperada de la primera de Marivent. La reina se ha reunido con sus asesores para encontrar la solución de tapar este revuelo, lo han hecho con esta exposición mediática para que todo el mundo hable de las fotografías, los vestidos y demás, y se olviden completamente de la ausencia de Sofía. Felipe VI no deja de estar preocupado con esta situación.