Malos tiempos para la lírica cantaban los Golpes Bajos. Para golpes bajos los que está recibiendo la reina Letizia desde que su ex Jaime del Burgo empezó a desembuchar. Malos tiempos para Letizia, podría ser una versión actual de la canción. La asturiana vive atemorizada por cualquier momento en que el empresario navarro se despierte con ganas de escandalizar más al personal, a menudo, a altas horas de la madrugada, cuando de vez en cuando se le ve con ganas de coger el teléfono móvil y empezar a publicar tuits sangrantes hacia los Borbones, especialmente hacia ella, o fotografías que dejan en mal lugar a los actuales monarcas. Y por lo que estamos viendo, este 2024 promete.
"Letizia lo está pasando muy mal y detrás hay una campaña del emérito contra ella, para tapar sus tropelías con aspectos negativos de Letizia. A estas alturas nadie duda de la veracidad de estas informaciones", decía esta semana Pilar Eyre sobre lo mal que lo está pasando Letizia. De hecho, días antes verbalizó la palabra "calvario". La escritora solo ve una salida exitosa para Letizia de cara a superar el que sin duda es su peor momento desde que unió su vida a los Borbones: dar la cara y coger el toro por los cuernos. "Sería una actitud inteligente enfrentarse a las cámaras, ella que tiene tanta facilidad, y decir 'pues mira, sí, he tenido este momento de debilidad, ha pasado esto, tanto el rey como yo lo hemos olvidado y lo hemos superado y vamos a intentar tirar del carro". Si no lo hace (o si no la dejan hacerlo) o si lo hace, quién sabe, el futuro de ella y Felipe se ve bien oscuro: "Gente de la casa real me ha contado que ella está hundida y que su matrimonio está pasando por momentos muy difíciles. No creo que el matrimonio de Felipe y Letíizia aguante más allá de este año".
Ya lo dicen que a perro flaco, todo son pulgas. Y es que al peor momento de Letizia le tenemos que sumar cómo se cachondea su suegro Juan Carlos, con quien se odian, en la distancia, celebrando su cumpleaños, y cómo se está quedando más sola que la una en Zarzuela, ya que no tiene ni el apoyo ni el calor de los suyos. Ni de sus hijas Leonor y Sofía, una en Zaragoza y la otra en Gales, haciendo la instrucción militar la mayor y el bachillerato la pequeña. Y para acabarlo de arreglar, su maridito también se ha marchado. Felipe, después de un acto en palacio, recibir las Cartas Credenciales de los nuevos embajadores de El Salvador, Macedonia del Norte, Irán, Perú, Tailandia y Angola, ha hecho las maletas rumbo a Guatemala, él solo, para asistir a la toma de posesión del presidente electo César Bernardo Arévalo de León.
La revista Lecturas pone de manifiesto que "este viaje pone de manifiesto que doña Letizia se queda completamente sola en casa". Antes, cuando Felipe viajaba sin ella, aprovechaba para pasar más tiempo con sus hijas, su gran apoyo. Ahora, ni eso. Aunque la reina es muy independiente, también es muy familiar, y más que lo sería en su peor momento como reina. ¿Y qué hará Letizia?: quizás reunir a sus amigos en casa o en algún lugar del barrio de Malasaña, "que tanto le gusta". Quizás se deja caer "en alguna presentación o feria". A pesar de que "A lo largo de los años han trascendido algunas salidas sin Felipe que podría repetir este fin de semana aprovechando que está 'de Rodríguez'. Una de las más recurrentes es con su hermana Telma Ortiz", dice el mencionado medio. Cita que si se produce, tengan por seguro que pondrán a caldo al ex de las dos, Jaime del Burgo. "Desde que regresara a Madrid en 2019, la relación entre las hermanas Ortiz es muy cercana. Tanto que es habitual que queden a comer en diferentes restaurantes de Madrid"... Seguro que a Del Burgo este fin de semana le silbarán las orejas.