Letizia es una mujer muy calculadora y controladora, demasiado exigente, con ella misma y con los demás. Es algo que la vincula mucho con la reina Sofía. Ese carácter ya era igual en su adolescencia y también en su juventud. Tanto cuando estudiaba y trabajaba en México, como cuando dio sus primeros pasos en TVE. Todos sabían que la mujer de Felipe VI llegaría muy lejos porque era una persona muy ambiciosa y luchadora. Sin embargo, jamás se imaginaron que se casaría con el príncipe. Aunque algunos de sus supuestos amantes, como David Tejera, entre otros, aseguran que ya preguntaba siempre por el hijo de Juan Carlos I. Quiso estudiar periodismo para llegar a él, su mente era demasiado retorcida. No daba ningún paso en falso.
Esta exigencia le ha causado más de un estrago en su salud. Letizia ha sufrido graves episodios de estrés y ansiedad. Ha sido atendida de urgencia por el equipo médico de Zarzuela y ha dado más de un susto a Felipe VI y a sus dos hijas. Ha habido dos episodios graves en su vida en el que no la habían visto tan mal, y uno de ellos era con el caso Nóos y las polémicas de Juan Carlos I. Ahí creyó que la monarquía desaparecería y tendría que exiliarse.
Letizia quiere tener todo bajo control y a veces es misión imposible. No solo los Urdangarin o los Marichalar le dan demasiados quebraderos de cabeza, sino también su propia familia a la que siempre ha intentado pararle los pies. La monarca está muy preocupada por las malas compañías de Carla Vigo.
La joven ha vuelto a caer en una época complicada que preocupa a todos los Ortiz Rocasolano, que siempre se han volcado en ella. De hecho, Letizia le pagaría un sueldo todos los meses para poder pagar el piso tutelado en el que reside. En unos meses se le acabará su pensión de orfandad de 450 euros por cumplir los 25 años de edad, y no tiene más dinero ya que no trabaja en la actualidad. Su sueño era ser actriz y bailarina pero parece que ha renunciado a él por amor.
Carla Vigo preocupa a la familia por sus malas compañías
Las personas más cercanas a ella como Christina Rapado asegura que sus nuevas amistades la están llevando por mal camino y se están aprovechando de ella, una persona vulnerable por su situación.
Letizia quiere ayudarla pero no puede hacerlo en público, ni ella tampoco se deja, no atiende a razones. A esto se le añade la preocupación por Leonor, a quien ahora mismo no puede ver tanto como le gustaría.
La madrugada del pasado martes al miércoles sufrió un cuadro de estrés grave por el que tuvo que ser atendida de urgencia. Además, últimamente se la ha visto más cansada, ya que no consigue conciliar el sueño por todos los problemas que tiene encima.