La Casa Real está sufriendo una de las mayores crisis de los últimos tiempos. Los medios de comunicación ya no se cortan, poniendo en marcha una campaña brutal contra ellos. El primer paso fue publicar unos artículos de opinión con unos calificativos muy duros, poniendo verde a Felipe VI. Y de aquí, a destaparse toda una serie de conversaciones entre Corinna, la amante del rey Juan Carlos, y el comisario Villarejo. Unas declaraciones en las que acusa al emérito de querer hacerla cómplice de un delito de blanqueo y de ser él el verdadero responsable de los delitos del caso Nóos.
La corona agoniza, ciertamente, pero Felipe y Letizia siguen como si nada. La primera en criticar su postura fue la periodista Pilar Urbano, considerando que el actual monarca tendría que echar al padre de la familia real.
Mientras eso no pasa, Felipe entrega medallas a militares y Letizia preside audiencias estrenando conjuntos estilísticos. Las niñas, de campamento en los Estados Unidos y la Reina reuniéndose con dos organizaciones solidarias.
Este jueves ha empezado muy pronto por ella, recibiendo en audiencia a los representantes de la confederación de Asperger España y el consejo general de la ONCE. Una ocasión por la que ha decidido sorprender y sacar del armario una nueva adquisición. Se trata de un vestido muy veraniego -seguramente demasiado- que ha dejado a todo el mundo boquiabierto. ¿Es adecuado organizar una reunión así con un vestido prácticamente de playa?
Polémico o no, el modelo es de lo más bonito y fresquito. Letizia ha dicho adiós a los formalismos en esta jornada, apostando por este Adolfo Domínguez de 189 € que podría llevar en cualquier otra ocasión. De color beige, largo y de un lino suave: escote cruzado, lazo en la cintura y flecos. Una elección que ha combinado con unos zapatos muy formales de altos tacones en color tostado. La Reina se ha mostrado muy sonriente todo el rato, presumiendo de tono morenito y sin vergüenza al lucir unas cuantas canas en el pelo.
Los monarcas no descansan, esperando como agua de mayo que vuelvan las hijas para poner rumbo a Mallorca. No sabemos, sin embargo, si Letizia estará demasiado entusiasmada teniendo en cuenta que serán unos días familiares al lado de su amigui la reina Sofía.