Ha sido una agenda tranquila para Letizia. La reina vació su agenda institucional por alguna extraña razón que se desconocía hasta la fecha. La mujer de Felipe VI es monarca, pero también madre, y eso prevalece a todas las cosas. La asturiana está muy preocupada por su hija. Aunque hace años que vive fuera de Zarzuela debido a su formación, es la primera vez que está tan lejos y encima incomunicada. No puede hablar con ella todos los días y no sabe cómo se encuentra. Eso le produce una cierta incertidumbre y aumenta su preocupación.

Están siendo tiempos muy complicados para la princesa. Es una persona con gran interés mediático y se ha encontrado con una excesiva persecución de los paparazzi, tanto a nivel nacional como internacional. Leonor sabe que es algo muy normal, pero está muy triste y desanimada. No puede tener intimidad ni privacidad y también provoca problemas en sus compañeros.
Letizia cogió un avión el pasado miércoles para reencontrarse con Leonor en Valparaíso, que llegaba a puerto el pasado jueves. Ha sido una visita fuera de la agenda institucional, no ha figurado en ningún sitio y se ha tratado con la máxima privacidad. Cogió su avión privado en la base aérea de Torrejón de Ardoz a altas horas de la madrugada.
La reina se encontró con una joven agobiada por los acontecimientos y bastante triste. En estos momentos la visita de su madre la ayudó a continuar con esta aventura. Para poder estar más días con ella, la princesa se marcha este martes 8 de abril, Letizia vació su agenda también el lunes. Vuelve hoy a Zarzuela tranquilamente.
Letizia da una serie de órdenes a la tripulación y a los escoltas para garantizar la seguridad de la princesa
Letizia se reunió en privado con el comandante a cargo de toda la tripulación de Elcano. Le dio una serie de órdenes e indicaciones para la salud física y mental de su hija. Al alto cargo no le gustó la actitud de la mujer de Felipe VI ni que le digan como tiene que hacer su trabajo, por él, la hermana de Sofía podría irse hoy mismo, ya que está complicando la travesía. También ha dado instrucciones a los cinco escoltas que garantizan la seguridad de la princesa. Se ha mostrado molesta por los últimos acontecimientos. Sabe perfectamente que es una situación muy complicada, pero han pasado cosas que deberían haberse evitado.
La reina llegó a Elcano pisando con fuerza y con mucha preocupación por su hija. Ya ha comunicado que a finales del mes de abril, con motivo del cumpleaños de la infanta Sofía, se la llevará a Madrid, volverá unos días más tarde a incorporarse a la navegación para terminar el trayecto hasta Nueva York.
Los compañeros de Leonor ven demasiados privilegios. Ellos no pueden recibir la visita de sus padres en los seis meses de travesía, y también están solos.
