Pilar Eyre ha dedicado 500 páginas del best seller del momento, Yo, el rey, a destripar a Juan Carlos, pero el libro tiene pocas páginas dedicadas a Felipe y menos a Letizia. La biografía de Felipe escrita por Eyre tendrá que esperar. La columnista más leída de la prensa rosa ha dedicado su blog en Lecturas a la crisis matrimonial de Felipe y Letizia. Aunque la solucionaron, el origen de las desavenencias son unos sospechosos viajes de la reina a Barcelona. En Blau ya explicó qué hacía la reina en la capital catalana según publicó Silvia Taulés.
Escribe Eyre: "Estuvieron en crisis en la época en que Letizia viajaba con cualquier excusa a Barcelona: un concierto de rock, una visita médica, ver a su hermana... Y aprovechaba para reunirse con sus amigas para huir del ambiente asfixiante de Zarzuela". Letizia visitaba Barcelona buscando rock'n rol. Eyre tiene fuentes en BCN y lo sabe. La excusa perfecta era visitar a su hermana Telma que vivía en Cataluña. Pero si estas "visitas" hicieron peligrar el matrimonio de los reyes es que no solo visitaba a Telma.
La columna de la Eyre explica de qué huía Letizia en Barcelona. Creía que todo los que se filtraba (su anorexia, mal humor, obsesión por el bisturí) era para tapar amantes y millones de Juan Carlos: "En la prensa solo salían comentarios sobre el último modelito o la delgadez de Letizia; era tan descarado el contraste entre lo que pasaba verdaderamente en el seno de la familia real y lo que reflejaban los periódicos, que llegó a sospechar que las noticias negativas sobre ella las filtraban desde la Casa para desviar la atención del comportamiento anómalo de Juan Carlos". Maquiavelo en Palacio.
Zarzuela ha jugado sucio con Letizia. Toda la prensa mirando lo delgada que está mientras Juan Carlos robaba a Hacienda. La crisis conyugal acabó y ahora, le explican a Eyre, la pareja todavía se ama: "Han pasado dieciséis años y aquella pasión del inicio se ha transformado en cariño, complicidad, objetivos comunes, profunda amistad, respeto mutuo". Felipe sigue en cuarentena por un contacto estrecho con alguien que tiene la COVID. Letizia sana porque ella no estaba en ese contacto. Estrechísimo.