Si algo ha caracterizado desde hace ya muchos años a la Reina Letizia es que, al contrario de lo que sucedía cuando era princesa y vivía a la sombra de sus suegros, desde que se convirtió en reina ha empezado a tomar una serie de decisiones que evidentemente han tenido consecuencias a nivel familiar.
Y es que no es que sea precisamente ningún secreto que, más allá de que el matrimonio formado por Felipe y Letizia no es que sea el matrimonio idílico que desde la casa real quieren vender, la reina ha empezado a apostar desde hace ya un tiempo por dejar de acudir a actos a los que su presencia no es estrictamente necesaria y que por lo tanto no dañan a la institución y, sobre todo, actos en los que no se siente precisamente a gusto, entre otras cosas porque son actos en los que la familia de su marido sí que tienen mucho juego.
Un buen ejemplo de ello fue la ausencia de la Reina a la reciente boda de la ahijada de Felipe VI, Victoria López Quesada, una ausencia que desde la institución argumentaron como más que evidente teniendo en cuenta que Ortiz había decidido acudir a los juegos paralímpicos que se celebraban en París apoyar a la delegación española.
Letizia quiere repetir ausencia en la boda de Teodora de Grecia
Por mucho que no fueran pocos los que aseguraran que no fue precisamente la mejor decisión de Letizia, entre otras cosas porque en ese enlace se pudo ver por primera vez imágenes de Felipe junto a su hermana la infanta Cristina, parece ser que la reina quiere repetir esta misma fórmula de cara a la boda que se celebra el próximo 28 de diciembre, en este caso con la sobrina de la Reina Sofía como gran protagonista, Teodora de Grecia.
Ya se sabe que al enlace acudirán evidentemente la Reina Sofía y sus hijos, Felipe, Elena y Cristina, pero no se sabe si acudirán al enlace Juan Carlos I y la Reina Letizia. Teniendo en cuenta que este tipo de ambiente real nunca ha encajado con Letizia Ortiz y que además la boda es de la sobrina de su suegra con la que no tiene precisamente una excelente relación, no sería extraño que la reina encontrar alguna excusa, creíble o no, para perderse de nuevo un acto.
Eso sí, cabe tener en cuenta que empiezan a ser ya varias las voces que apuntan que este tipo de actitudes y de ausencias por parte de la Reina están empezando a jugar en su contra, especialmente a nivel de imagen.